- “Restaurantes y gasolineras; lugares más comunes donde se realiza clonación”: Condusef
- Se recomienda privilegiar los establecimientos que cuentan con terminales inalámbricas para no perder de vista el plástico
Durante los diez meses que van de 2013, se han presentado doce clonaciones de tarjetas bancarias y 38 casos de fraudes cibernéticos, mismos que cuentan con un proceso por parte de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) mediante su delegación en el estado.
Así lo refirió Juan Carlos Medina Mazzoco, delegado de la Condusef, quien explicaría que de los 20 mil usuarios que se han atendido, 500 han llegado a una audiencia acerca del problema, de los cuales se ha estimado que son doce los casos específicos donde se ha llevado a cabo la clonación de tarjetas, a lo que se suman los 38 casos de fraudes cibernéticos que se han presentado en el estado.
Respecto a las instituciones bancarias que han sido mayormente afectadas por dicho fenómeno y los lugares donde se presentan dichas clonaciones, Medina Mazzoco destacó que “no hay un banco que predomine sino que han sido todos los bancos y no se sabe con precisión donde se han realizado las clonaciones” algo que dijo “ni el mismo usuario lo sabe porque hay dos tipos de clonaciones; las de origen que se realizan en los sitios donde se hacen los plásticos, y las clonaciones en sitio”.
Explicó que para las clonaciones de origen no se necesita el plástico sino que con la información extraída de la cuenta se puede realizar la clonación, mientras que para el segundo caso, expuso que los restaurantes y gasolineras son los casos más comunes donde se tienen los aparatos con los que se realiza la clonación, por lo que recomendó asistir a lugares que cuenten con terminales inalámbricas para de este modo no perder de vista el uso que se le da a su tarjeta.
Señaló que se ha presentado un mayor número de casos de fraudes cibernéticos, específicamente 38 denuncias, en las que el afectado ha sido víctima de correos electrónicos o páginas de internet apócrifas que solicitan información bancaria y realizan el fraude, ante lo que invitaría a los usuarios a no entregar información de vital importancia por ese medio, así como tampoco realizar trámites importantes en sitios inseguros como son los internet públicos, donde se corre el riesgo de que las contraseñas y códigos puedan ser mal utilizados.
Foto: Roberto Guerra.