- En ocasiones las mujeres han tenido, y tienen todavía, una menor formación que los hombres en muchos lugares de Iberoamérica
- A pesar de los esfuerzos sólo un 30 por ciento de las mujeres de América Latina representan los consejos Municipales de las ciudades
Para Luis Rogelio Rodríguez Comendador, presidente de la Unión Iberoamericana de Municipalistas (UIM) existen algunos obstáculos que son clave para alcanzar una igualdad de género real no sólo en los municipios, que son su principal objetivo, sino en todos los estados y países de Iberoamérica, como lo es la educación.
“Es evidente que una buena formación es fundamental para el futuro en cualquier aspecto de la vida” en muchas ocasiones las mujeres han tenido, y tienen todavía, una menor formación que los hombres en muchos lugares de Iberoamérica.
Por lo tanto destacó que si se le retirara una faceta de las responsabilidades propias de las mujeres (por tradición) como las tareas del hogar y proporcionarles más educación para poder culturizarse más, “como primera medida tiene que ser una educación igualitaria en todos los sentidos” así como la capacidad de acceso a la mujer a los medios de educación en total y absoluta equidad, pues una mujer mejor formada es una mujer que tiene posibilidades de que se le abran más puertas en cualquier aspecto de la vida.
A su vez señaló tener que conocer y saber que la capacidad de la mujer en algunos temas, condiciones de la vida y situaciones especiales, es mucho más sensible que el hombre a la hora de llevar a cabo algunas actividades, como en el caso de la política donde cercioró que la sensibilidad de la mujer suele ser mucho mayor que la del varón, por lo tanto, su acceso a los principales puestos de la política no puede ser una excepción, tiene que ser una norma general.
“Aquí tenemos una alcaldesa, un hecho real es que es posible que a ella le haya costado mucho más que lo que le pudo costar a un hombre llegar a este puesto” pues durante toda la historia del hombre ha sido así, esas barreras son entonces las que se han propuesto derribar ya que no ponen en igualdad de condiciones al hombre y a la mujer para acceder a los mismos lugares en cualquier aspecto de la vida.”
La coordinadora de la Red UIM de género, Ana Falú añadió que en la primera Cumbre Iberoamericana (2011, Córdoba, Argentina) se logró una declaración que se trata de una acción que va más allá de lo meramente declarativo, “toma una serie de puntos y se transforma en una agenda de trabajo”, esta fue la Declaración de Córdoba, la cual es una agenda de trabajo para los gobiernos locales para alcanzar la igualdad de género y de oportunidades entre mujeres y hombres.
Desde su opinión como técnica y experta en los temas de género, destacó esperar con esta segunda cumbre el avanzar en la desagregación de los temas de trabajo manifestados en la Declaración de Córdoba así como en la articulación de redes, es decir, formalizar las redes que están ya aportando algo en el tema a Iberoamérica y crear aquellas que aportarán un gran apoyo en México e Iberoamérica, planteando la importancia de los temas que hacen a esta igualdad de género.
Pues ésta se trata de una razón de justicia social, aunque el que las mujeres y los hombres tengan igualdad de oportunidades no los hace mejor unos de otros, los hace ciudadanos con iguales posibilidades y condiciones “estamos hablando de una ciudadanía plena y activa, de hombres y mujeres”.
Pues a pesar de los instrumentos ganados en peleas feministas o socialistas por las mujeres en el campo de la política como son las leyes de cuota, se ha logrado tener un registro en toda América Latina de un 30 por ciento de las mujeres en los consejos Municipales de las ciudades, “no hemos logrado accionar eso hacia los ejecutivos, aún los sueños de mujeres alcaldesas como Carmen Martín del Campo (1950) o Lorena Martínez (2010) siguen en lucha” las políticas de género en Aguascalientes representan un 11 por ciento en toda América Latina, por ello cercioró necesitar la apertura de los canales para poder tener la participación política, por ejemplo, “necesitamos más mujeres participando en igualdad de condiciones y de oportunidades que los hombres”.
En América Latina los partidos políticos tienen que trabajar a lo interno de sus instituciones y personal, para que las listas que se constituyen con mujeres y hombres sean listas de liderazgos genuinos que alcancen lugares importantes y trascendentales y no sólo el cumplimiento de un requisito político.
El tema de igualdad de género es de construcción, sujeto de la mujer, que debe ser transformado por medio de la democracia, el pensamiento democrático y el avance en la construcción de la democracia en la sociedad.
Sin embargo, según la coordinadora de la Red UIM de género, el principal enemigo para poder alcanzar este objetivo es la tradición, las pautas culturales que han logrado construir un imaginario en el cual han colocado a las mujeres en una posición subalterna, “tiene que ver con el gran debate que es la división sexual del trabajo” a nivel mundial acerca de la igualdad de oportunidades para mujeres y hombres.
Ejemplificó con el tema de la maternidad, “esto no es sólo de las mujeres, está la maternidad y la paternidad” a los hombres se les ha privado por largo tiempo el disfrutar de poder ejercer esa paternidad responsable siendo un rol tradicionalmente de la mujer por lo tanto la sociedad se ha privado de muchos talentos femeninos.
Por ello para Falú debe encontrarse un equilibrio entre cómo las mujeres pueden seguir aportando a la sociedad no sólo en lo simbólico o cultural sino también económico, esto significa que el trabajo de las mujeres tiene un costo, un valor, que puede ser evaluado si se logra la igualdad de género.
Foto: Gilberto Barrón.