- Las condiciones de nuestra capital requieren de capacidad y preparación.
- Urge contundencia para combatir la corrupción y la impunidad.
Las condiciones demográficas y sociales que mantiene nuestro Aguascalientes no deben dar cabida para que nos llegue a gobernar un presidente municipal improvisado, así el mensaje que lanza Jesús Medina Olivares, candidato del Partido del Trabajo a la Presidencia Municipal de la capital, del mismo modo que agregó que la ciudadanía debe tener bien claro que en estos momentos se requiere de un candidato que cuente con la preparación para asumir un cargo tan importante, pues de lo contrario, en un futuro veremos las consecuencias de no haber tomado las decisiones que hoy en día son urgentes.
“Realmente sería una gran lesión para el futuro de nuestra capital y de nuestra gente el que llegue un candidato que no tenga la capacidad para gobernarnos y eso deben de tomarlo en cuenta los electores… ésta será una elección de estado, pero la confianza de que la ciudadanía es consciente de ello”.
Asimismo, Medina Olivares mostró que una de las estrategias principales de la estructura municipal debe concentrarse en el combate de la corrupción y la impunidad, esto mediante una toma de decisiones contundentes, comenzando bajo el viejo precepto del barrido de las escaleras, pues éstos son males que deben abatirse desde los más altos niveles, hasta la más modesta de las ventanillas municipales.
Como parte del abatimiento de estas lacerantes prácticas, el candidato del PT realizará la modificación del ambiente institucional que es a la vez generador de las mismas o que incluso toleran los actos de corrupción.
“Debemos establecer controles de prevención y sanción, pues en justicia, reconozco que existen hombres y mujeres al servicio de la seguridad pública que hacen su mejor esfuerzo con lo que tienen a la mano, incluso sin la protección requerida, poniendo su vida en juego”.
Aseveró, también, que debe prevalecer la primacía de la prevención sobre la contención de los delitos, lo cual significa darle prioridad y mucha mayor importancia al desarrollo de estrategias de prevención que promuevan conductas tendientes a la reducción de riesgos.
“¿Qué buscamos con esto? Pues un equilibrio en el gasto que hasta el momento se destina a la prevención, con relación al del control, e inclusive revertirlo… pues debemos de trabajar en la recuperación de espacios públicos para impulsar la convivencia y la cohesión social con atención especial a cuestiones como la iluminación, el paisaje, la visibilidad y el mobiliario urbano de dichos espacios”
De la mano también se encuentra la implementación de un programa de control de adicciones efectivo, para que realmente se vea al adicto como un enfermo y no como un delincuente, por lo que la atención debe darse basándose en un problema de salud pública y de seguridad social, y no por la vía más fácil, que es la de encarcelar a los jóvenes.
“Tenemos la intención de implementar un programa integral de prevención de las violencias, generando una cultura de la prevención e Identificación de los factores y conductas de riesgo… lo mismo que llevar políticas para la juventud… todos debemos ser conscientes de que los jóvenes no representan peligro, sino que son ellos quienes están en peligro”.
Foto: Gilberto Barrón