- Organizaciones lo exhortan a finalizar con iniciativa de Ley de Diversidad Sexual por ser una ley nazi
- A lo largo de la semana se recolectarán firmas para entregar un documento oficial al dirigente de Movimiento Ciudadano
- Solicitan un encuentro público con los medios para debatir la iniciativa y frenar su llegada al Senado de la República
A su llegada a Aguascalientes, Gloria Hazel Davenport, periodista y activista fundadora de la organización Prodiana, anunció haberse iniciado un proceso de recolección de firmas a partir del día de ayer por redes sociales, para entregar una carta al dirigente de Movimiento Ciudadano del Distrito Federal a consecuencia de la iniciativa presentada en rueda de prensa el pasado 17 de mayo de una Ley General de Diversidad Sexual, donde se pretende credencializar a todas las personas pertenecientes a la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero e Intersexo (LGBTTI) así como una cartilla de salud especial, “además de manera cínica pretenden la creación de un instituto de la diversidad sexual controlado por gobierno y ellos”, lo cual se está proponiendo a través de Armando López Campa, político aguascalentense.
“Esto sería un control de toda la población LBTTI del país de manera negativa”, tal iniciativa es considerada por esta activista como una ley nazi, ya que recordó las acciones de los alemanes al colocarle un triángulo invertido de color rosa a todos los homosexuales del país antes de enviarlos al campo de concentración, “esta medida nazi es patética, he platicado con personas de Aguascalientes que están muy molestas por lo que hizo López Campa”.
A lo largo de los años que Davenport ha estado en el activismo, señaló nunca haberse encontrado con algo tan denigrante y “estúpido”, ni siquiera con la derecha, que es conocida como PAN y PRI; lo que por ende a los demandantes les demuestra una “profunda ignorancia” del tema por parte López Campa.
Explicó que en el tema del VIH, a causa de la falta de información, hay una Norma Oficial Mexicana –la 0102000- que habla directamente de que el estado de salud es confidencial y no se puede poner una cartilla especial, “no es posible que la coordinadora de los Derechos Humanos de Movimiento Ciudadano no se haya informado antes de aceptar esta iniciativa”, ya que en el Artículo 1 de la Constitución Mexicana habla sobre la no discriminación, o de un instrumento muy importante a nivel internacional -los Principios de Yogyakarta- dice en el Artículo 7 que no se puede obligar a nadie a que evidencie o visibilice su preferencia sexual.
Un tercer punto “peligroso”, a su parecer, es la relación que tienen López Campa y Jaime López Vela, secretario de Diversidad Sexual de Morena, con el dirigente de Movimiento Ciudadano en Aguascalientes, André Villalpando Barragán, “los tres han sido vinculados en asuntos no éticos” y de protección especial a personal de Vela.
En entrevista telefónica, Fabiola Díaz de León, vocera del documento, aclaró que la iniciativa aún no es presentada ante el Senado, pero que se estará trabajado a lo largo de la semana en la recolección de firmas para lograr frenarla y tener una cita con el dirigente para reunirse públicamente con él ante los medios y debatir esta iniciativa, para lograr frenar su llegada al Senado de la República.
Dicho documento se encuentra en las redes sociales y correos electrónicos de los involucrados, donde se le solicita además que finalice su relación laboral con Samanta Fonseca, coordinadora de Derecho Humanos de Movimiento Ciudadano en el Distrito Federal, quien aceptó y acercó la iniciativa. “Esto termina siendo una mafia política, porque ella no informó a sus superiores la gravedad de la iniciativa”, además de dar a conocer la existencia de otra iniciativa de la senadora Angélica de la Peña, titulada Ley de Igualdad y Derechos, basada en los principios de Yogyakarta, “ésta sí es digna y justa, que califica una salud mental saludable por parte de ella”.
Por otro lado, Davenport recordó que la creación de un instituto de diversidad sexual en cuestión electoral beneficiaría directamente al partido y a sus dirigentes, ya que continuaría el trabajo de “intercambio de gente” en los espacios políticos.
Demandó: “¿y nosotros qué? ¿Qué pasa con nuestros derechos, acaso somos herramientas de un triángulo político-pasional?, estamos hablando del destino de 10 millones de personas que no se puede tratar en escritorios de políticos”.
Por lo tanto, señaló que esta iniciativa propuesta no sólo afecta a la comunidad LGBTTI, sino a toda la sociedad. La diversidad sexual abarca también la heterosexual, por lo que sería inviable introducir a 100 millones de personas en un mismo instituto.
Foto: Gilberto Barrón