Si el gobernador y la Alcaldesa de Aguascalientes no se echan porras a sí mismos reventarían de tantos “reconocimientos” a sus respectivas administraciones que los medios masivos de comunicación difunden a placer con cargo al erario público sin que nadie pueda contener la farsa de su gestión gubernamental. En el arranque de las campañas, José Carlos y Lorena, desbordando su caricaturesca megalomanía, presumidos como ellos solos, vuelven a los elogios mutuos para reconocer que su “buen gobierno” es merecedor de premios nacionales, aunque sean “patito”. El gobierno del estado, en sendas planas, publicó en distintos diarios locales, la felicitación a Lorena Martínez Rodríguez por haber obtenido el “Premio Nacional al Buen Gobierno 2013”, que acredita al Municipio de Aguascalientes como el más destacado entre los Ayuntamientos de todo el país, gracias a la implementación del proyecto “Línea Verde”, a sus “finanzas responsables” y a su liderazgo municipalista, en beneficio de miles de habitantes de la ciudad. Lo que no dicen el gobernador ni la alcaldesa, y menos en público, es que el que otorga el “deslumbrante premio” es nada más y nada menos que uno de tantos membretes que el PRI utiliza para promocionar a los gobernantes emanados de sus filas a través de asociaciones que aunque sean fantasmas sirven para “aplaudir” las acciones de sus dizque buenos gobiernos. La Federación Nacional de Municipios de México (Fenamm) tiene su sede en la Ciudad de México, en el edificio del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, sito en Insurgentes Norte número 59, Piso 3 Colonia Buenavista. Cobra a todos los municipios gobernados por el PRI una cuota anual y cuenta con una red de oficinas al servicio de sus afiliados en tres regiones del país, Morelia, Puebla y Tepic. De esta manera, esta organización tricolor premia a todos los alcaldes del PRI hasta por utilizar escobas ecológicas en el cumplimiento de sus deberes constitucionales. Pero estamos en campaña y el PRI necesita, fiel a sus viejas prácticas, vender al electorado sus “buenos gobiernos” que están más aplaudidos que Roberto Gómez Bolaños. No dudo que José Carlos y Lorena, presenten como la octava maravilla del nuevo PRI a Paco Chávez como alcalde de Aguascalientes. Son capaces de inventarle méritos y endilgarle atributos que la más avanzada ciencia no ha podido descubrir. Si el gobernador puede meter las manos a la lumbre por el “Procu-torturador” conociendo que el fuego le hace a los “chamucos” lo que el viento a Juárez, qué no haría por Paco Chávez, su candidato predilecto, a quien se le prepara la más grande campaña política de todos los tiempos en el Municipio de Aguascalientes. Son capaces de instituirle un premio o una estatuilla como la recibida por Lorena en León Guanajuato, cuidando lógicamente que este premio no se parezca en nada al “óscar” y no precisamente el que entrega la academia de las Artes y la Ciencias Cinematográfica, sino al Óscar López Velarde que está en calidad de desaparecido político. Volvió el PRI y volvieron los “premios patito” que la Federación de Municipios de México, apéndice del PRI ha entregado a Lorena Martínez por haber parido la “Línea Verde”. En la antesala de las elecciones en 14 estados del país, la Fenamm también premió al municipio de Tijuana por el saneamiento de sus finanzas; a Saltillo en Desarrollo Sustentable; a Naucalpan en Fortalecimiento de la Gestión Municipal; a Durango en Planeación Estratégica para el Desarrollo Urbano; a Zacatecas en Promoción del Patrimonio Cultural; a Querétaro en Prevención del Delito; a León en Cohesión y Desarrollo Social y a Tlalnepantla en Proyectos Innovadores. Empezaron las campañas y volvió el PRI con lo mismo de siempre. Quién puede negar que José Carlos y Lorena siguen dando pena, a pesar de sus elogios mutuos y sus premios patito.