En serio. A medida que se acerca el momento de la verdad para estas elecciones, la definición de los candidatos de a de veras pues, y una vez que los partidos dejen de estar jugando con los patiños y el dinero de la ciudadanía a las precampañas, se pondrá seria la cosa en la política local, porque será cuando los candidatos realmente salgan a exponer sus ideas sobre gobierno y políticas públicas, y será ahí cuando las lealtades, filias y fobias se pondrán a prueba.
Hasta el momento los partidos se han ido por la fácil. Al abrazar desesperados como eje la “unidad”, Francisco Chávez Rangel y Óscar López Velarde no tienen por qué hacerse daño, incluso eligieron ir en tándem para ahorrar costos, donde va el ex titular del Instituto de Educación, se presenta con quien fuera secretario de Ordenamiento Territorial; movimiento por demás astuto, porque así no deberán tener problemas al momento de justificar sus gastos de pre campaña; eso sí, aunque vayan juntos, sólo a uno de ellos es a quien constantemente le levanta la mano el gobernador Carlos Lozano de la Torre; y no nos digan que es coincidencia que siempre aparezca a su derecha uno de los precandidatos, siempre.
Una vez que se haga público lo que ya todos rumoran, el entonces candidato tendrá que elegir su tema de campaña y ése será el momento de las definiciones, al provenir ambos candidatos del lozanismo, quien sea ungido tendrá que defender el proyecto de Lozano de la Torre, en sacrificio de cualquier idea propia que tenga, incluso en demérito de tener que reconocer lo que Lorena Martínez ha logrado para la capital del estado.
Si los números no mienten, poco es lo que se le puede criticar en materia de empleo a la administración estatal, por eso llama la atención que cuando se le menciona a López Velarde si su proyecto es la continuidad, se incomode un poco, le dé vueltas y termine haciendo énfasis en seguir generando empleos, pero con calidad. Inevitable ligarlo con la experiencia de Gabriel Arellano Espinosa, en algún momento conocido como el Señor de los Puentes, pues los empleos que generó esa apuesta si bien en cantidad son considerables, en calidad ya no salen tan bien librados. También duda López Velarde al escuchar lo de continuidad, porque no le queda más remedio que identificar como méritos algunas acciones de Lorena Martínez y, cuidadoso, defiende la aplicación del foto radar y señala que lo mantendrá, para enseguida llevar a quien lo entrevista a sus terrenos y hablar de lo que sabe. Sobre el proyecto del “amigo” Chávez Rangel, bueno, poco se puede hablar, pues ha insistido en ligar la administración de la ciudad con la de las escuelas, como ya hemos comentado.
Mientras que del lado del PAN y PRD, ya les llegará el momento tanto a Felipe González González como Antonio Martín del Campo de ponerse serios y proponer ideas; hasta el momento, con el pretexto de las visitas a la militancia, han mantenido un bajo perfil, para permitir que los trancazos los reciban Jorge López Martín y Óscar Estrada Escobedo, para que como dirigentes de partido expliquen el poco común hermanamiento de estos dos organismos. Una vez que se defina el candidato de la alianza Unidos por ti, y todo se someta a la clara evidencia de que todo se trata de obtener el poder, más allá de ideologías, González González o Martín del Campo tendrán que decidir si en verdad el eje de su campaña será el de la inseguridad, tema que mal que bien ambos contendientes han querido usar como ariete para pegarle a la administración priísta de Lorena Martínez.
Mamar gallo, en Colombia esta expresión se emplea para referir que alguien hace burla de algo o te está tomando el pelo, el Diccionario comentado del español actual en Colombia, define así: Bromear, hacer chistes a costa de alguien, no tomar en serio las personas, lo que dicen, lo que hacen. Un ejemplo de su aplicación sería: José Luis Novales Arellano dijo que dedicaría su campaña a hacerle imposible la vida a la alianza del PAN y PRD cuestionándolos acerca de sus diferencias ideológicas, y todos se reían de la mamadera de gallo; ése es nuestro resumen de lo que hasta ahora lleva de campaña el ex panista abrazado por las huestes naranjas de Vicente Pérez Almanza.
Los gastos y los gestos. En más temas de campaña, no tiene desperdicio el dato que presentamos en la edición de hoy sobre el monto que se gasta el Instituto Estatal Electoral para evitar que seis consejeros se manchen las manos: 104 mil 400 pesos para que les llegue una síntesis informativa a sus correos o celulares, es decir, Georgina Barkigia Leal, Claudia Eloísa Díaz de León González, Dafne Elena Domínguez López, María de Montserrat Mendoza Brand, Luis Fernando Landeros Ortiz y Sandor Ezequiel Hernández Lara ni siquiera se toman la molestia de comprar un periódico o sintonizar la radio o la televisión, pagan para que les llegue un resumen de noticias. ¿Está bien, está mal? Un dato a considerar, el Congreso de Aguascalientes (como el Gobierno estatal o municipal) cuenta con una “síntesis diaria”, cualquiera puede consultarla en su página, es gratis, lo mismo el newsletter de La Jornada Aguascalientes y una búsqueda mínima en la red da como resultado una enorme cantidad de vías para mantenerse informado, ¿vale la pena el gasto?, porque no es un servicio especializado, no es como el monitoreo que el IFE hace de las campañas, es simple y llanamente para entretener a los consejeros, ¿cómo lo justifican? Y si mencionamos la síntesis del Congreso es para que no nos digan que no se les ha ocurrido una mejor manera de coordinar esfuerzos con el fin de ahorrar en gastos… en fin.
La guerra de los clones. Hace unos días mencionábamos que había que tener cuidado con el surgimiento mediático de asociaciones y membretes que con la máscara de ciudadanos cumplían con la función de golpeadores, poníamos el ejemplo de Impulso Nacionalista, grupo de Juan Ruvalcaba Tejeda, que con descaro absoluto pide regidurías a cambio de remolcar simpatizantes a los mítines. También hablamos de un tal Alafita, que al final fueron dos.
La misma gata pero… Uno es Aquiles Alafita Sáenz, quien al frente de Todos con Aguascalientes y en nombre de los jóvenes pide que se abran las puertas a los jóvenes; el otro es Mauricio Alafita, quien se desempeña como secretario de la juventud del Partido Verde Ecologista de México. Corregidos los nombres, nos parece que no hay que corregir las intenciones que vemos en su discurso. Aquiles Alafita, el “ciudadano” preocupado por los jóvenes recién apareció en la escena local para convocar a ruedas de prensa, y mal que bien, apoyar al precandidato del Revolucionario Institucional Francisco Chávez Rangel, aunque donde cobra es en el municipio capital. El otro, Mauricio Alafita, es quien desde el Verde ha criticado el desempeño de Eduardo Rocha al frente del Injuva… Por eso creemos que sigue siendo pertinente la pregunta, si en el fondo ambos son priístas, el primero por convicción, el segundo por culpa de la coalición, ¿no sería mejor que en sus esfuerzos por “abrir las puertas” a los jóvenes asumieran que lo hacen desde un partido?, ¿vale la pena manosear el término “ciudadano”? Son preguntas retóricas, una vez que pase el periodo electoral los Alafitas no tendrán necesidad alguna de llamar la atención.
La del estribo. Ayer, por falta de espacio, ya no agradecimos al poeta y promotor cultural Marco Antonio Campos el permiso que dio a esta casa editorial para reproducir su texto Fraguascalientes y Víctor Sandoval, que fueron las palabras que Campos pronunció con motivo del 75 aniversario del maestro Víctor Sandoval; desde aquí nuestro agradecimiento y la invitación a la lectura de este texto que consideramos certero y esclarecedor sobre el autor de Fraguas y de cómo amistad y caudillaje cultural no son malas palabras cuando van juntas.
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