- Joya de discurso el de la joven Diana Arcelia Mejía Romo, guapa y talentosa
- La unidad nacional no significa renunciar a nuestras convicciones o suprimir la competencia política
En la ceremonia conmemorativa al Día de la Bandera, una joya de discurso fue el de Diana Arcelia Mejía Romo, Premio Estatal de la Juventud 2012, que además de guapa y carismática es firme y talentosa:
“En 1810, ante el antiguo imperio… Señor, gobernador, distinguido presídium… Muchos no conocen el significado de nuestros colores; y si los saben, no los sienten”.
Mejía Romo invitó a los presentes a dejarse cautivar por la bandera de México y la historia que en ella se guarda, por los héroes que vieron en nuestra tierra un futuro prometedor y juraron con sus vidas defenderla. “Estos héroes, de los que estoy hablando viven, no sólo en el pasado sino también en el presente, en cada uno de nosotros. Somos los héroes del siglo XXI, nuestras armas ahora son nuestra palabra y convicción”, refiriendo que los jóvenes son la fuerza que mueve al país y que están comprometidos con México.
Majestuosa, la bandera oteaba alegre, fresca, energizada, en su gigantesca asta, en la explanada de las Tres Centurias; en el presídium, el gobernador Carlos Lozano de la Torre, su esposa Blanca Rivera Río de Lozano, las Fuerzas Armadas, el diputado Juan Manuel Gómez Morales, presidente de la Mesa Directiva del Congreso del Estado; el magistrado Juan Manuel Ponce Sánchez, representante del Poder Judicial; César de la Sancha Villa, comandante de la XIV Zona Militar; Lorena Martínez Rodríguez, alcaldesa de Aguascalientes; Javier Aguilera García, jefe de Gabinete de Gobierno del Estado; Sergio Reynoso Talamantes, secretario de Gobierno; Felipe Muñoz Vázquez, procurador de Justicia del Estado; Rolando Eugenio Hidalgo Eddy, secretario de Seguridad Pública, y en primera fila, representantes de los sectores privado y sociales, aquéllos y éstos, nombrados por el jefe del Ejecutivo al iniciar su discurso:
“La bandera es lo más simbólico de la patria…Comandante Isaac Bravo López, de la XIV Zona Militar, general Rolando Eugenio Hidalgo Eddy, delegados, empresarios, rectores, estudiantes, particularmente a Diana Mejía Romo, coro escolar, señoras y señores… Tiene una relevancia especial rendir a nuestra bandera, en este sitio ferrocarrilero por largo tiempo… Que suspira nostalgia”.
Lozano de la Torre afirmó que el interés supremo de la nación y de Aguascalientes debe prevalecer por encima de cualquier interés particular, para hacer realidad la aspiración legítima de un país más incluyente, justo y equitativo.
“De ninguna manera, la unidad nacional significa renunciar a nuestras convicciones o suprimir la competencia política. Se trata de fortalecer nuestras coincidencias y dirimir nuestras diferencias en el diálogo y la institucionalidad, para lograr los grandes acuerdos a favor de México y particularmente de Aguascalientes”, resaltó.
Los aguascalentenses, abundó, hemos dado ejemplo a nivel nacional de unidad, respeto y acuerdos, que están impulsando la convivencia cívica; el relanzamiento económico de nuestra entidad con proyectos líderes a nivel mundial y políticas públicas transversales en materia social, que nos han posicionado en un lugar relevante de la agenda nacional e internacional.
“La enseña nacional que este día ponemos en manos de distintas dependencias del Ejecutivo estatal, simbolizan el compromiso permanente de mi administración para mantener y fortalecer los valores de solidaridad, trabajo y diálogo, porque son nuestra mejor guía para avanzar hacia el futuro. México y Aguascalientes son nuestra bandera. Con esta convicción rendimos honores a nuestro lábaro patrio, reafirmando el compromiso con la unidad y el progreso de todos”.
Luego del izamiento del lábaro patrio, con el apoyo protocolario de oficiales del Ejército, el gobernador Lozano abanderó también a cada uno de los funcionarios integrantes de su Gabinete, desde Jorge Narváez de Desarrollo Agropecuario, hasta Hipólito Treviño de Desarrollo Económico, uniformados todos con traje negro, camisa blanca y corbata roja.
Javier Rodríguez Lozano/Redacción
Foto: Gerardo González