- Juicios no deben ser contra autoridades, sino hacia particulares
- Denuncias sobre transgresiones a la ley sólo se realizan para hacerlas mediáticas
Hasta los curas exhortan a mantener un comportamiento prudente en las campañas para promocionar el voto, así como lo hacen las autoridades electorales a nivel local, pero desgraciadamente, estas sugerencias sólo son “llamadas a misa”, ya que por encima de los establecimientos legales, se encuentra el deseo y la alevosía de los aspirantes y partidos políticos de transgredir lo que dicta el marco normativo en materia electoral.
Gregorio Zamarripa Delgado, coordinador del grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, aseveró que en materia de fiscalización de los recursos que se gastan en promoción de aspirantes y candidatos, debe existir un marco regulatorio mediante el cual se tome en cuenta lo que gasta la gente que se está promoviendo, así como lo que aportan los partidos políticos, con la intención de controlar la situación que estamos viendo el día de hoy en materia de promoción electoral, y que además, no sólo haga una revisión de los procesos electorales, sino de los momentos en los que se comiencen a cocinar los proyectos y aspiraciones.
Según lo planteado por José Woldenberg, a quien Zamarripa Delgado considera como el padre de los demócratas o aspirantes a demócratas, la transición democrática está en camino, de modo que el juicio y los señalamientos no deben hacerse sobre las instituciones electorales, ya que la problemática está en los particulares, pues están alejados de la línea de la legalidad y buscan los huecos legales para beneficiarse a pesar de que estén transgrediendo la ley.
Una de las estrategias de las autoridades electorales debería ser blindar los espacios en los que no haya procesos electorales, con la intención de que no se fortalezcan ciertos personajes o partidos políticos en el momento de las campañas, ya que cuando se inicia la competencia legalmente, éstos aventajan mucho a quienes sí respetan la ley, por lo que sería una situación completamente contraria a lo que sucede en estos momentos, en los que sólo se vigila el proceso electoral como tal.
Es cierto que las leyes, incluso las locales, cuentan con el alcance de sancionar diversos actos, pero el problema es que los actores o los partidos políticos no denuncian estas situaciones cuando no hay campaña, sino que las realizan en pleno proceso electoral, con la intención de hacerlas mediáticas y que resulten en beneficio para quien las haga, por lo que considera que no debe pensarse en tomar acciones en la presente elección, sino que hay que trabajar en materia legislativa, para evitar que en los procesos electorales del 2015 o 2018 suceda más.
Foto: Roberto Guerra | Gregorio Zamarripa, coordinador del grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional