- En el 2012 se registraron 14 incendios con 260 hectáreas afectadas
- El 99 por ciento de los incendios son causados por el hombre, sobre todo por colillas de cigarro
Tras la aparición de lluvia durante este inicio de año, Audómaro Alba, delegado de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), declaró en rueda de prensa que fue benéfica para el sector rural del estado, además de que retrasará por casi dos meses los incendios forestales que se dan por sequías de temporada.
Durante el segundo semestre del año se va secando el material vegetal, es por eso que en el primero se presenta la temporada crítica con incendios. Debido a esto, la Conafor se coordinará con los municipios para realizar tareas de prevención.
Sin embargo la lluvia tiene un doble efecto: por un lado genera humedad y ésta a su vez da origen a más vegetación, y por el otro, con el paso del tiempo y con el calor se convierte en material seco, el que puede provocar incendios.
El delegado estatal de la Conafor señaló que durante el pasado 2012, se registró un total de 14 incendios con 260 hectáreas afectadas, de los cuales ocho se presentaron en el municipio capital, tres en Calvillo, dos en Jesús María y uno en Asientos, sin embargo, fue un año mucho más bajo que el 2011, en el que sucedió el fuerte incendio del Cerro de los Gallos que afectó 400 hectáreas que colindan con Jalisco y 60 hectáreas de territorio aguascalentense, dejando una semana de fumarola.
“Éste implicó una tarea de coordinación con el Ejército, brigadas de Jalisco, Protección Civil de Encarnación de Díaz y de Aguascalientes”, para combatir la contingencia en cinco días. La causa principal de dicho incendio fue el gran cúmulo de material vegetal, pues no se hicieron los trabajos de prevención para disminuir el material vegetal.
Audómaro Alba destacó que la temporada crítica abarca del 15 de enero al 30 de junio, pero los días más preocupantes son los de Semana Santa, debido a las personas que acampan y que descuidan las fogatas, además de que arrojan las colillas de cigarro a la carretera.
“El cigarro es la principal causa de incendios forestales, se ha insistido mucho en el cuidado en esta acción”, y señaló que el 99 por ciento de los incendios son causados por el ser humano.
El delegado aseguró que lo que más alimenta los incendios es el pastizal, sobre todo los matorrales y los árboles, ya sean mezquites, huizaches o nopaleras, pero debido a su gran vitalidad sólo llegan a “chamuscarse”, por lo que al paso de algunos meses, rebrotan y siguen con su proceso de vida.