- La Escuela de Arquitectura de la Universidad Panamericana organizó el taller “Arquitópicos VII”, inspirado en la obra de Luis Barragán
- El evento contó con la participación de los expertos Enrique X. de Anda y Shunichiro Higashi, quienes abordaron aspectos teóricos y prácticos de la obra de Barragán
- El taller permitió a 81 estudiantes trabajar con conceptos de color y luz, promoviendo la creatividad y el entendimiento profundo del legado del arquitecto mexicano
La Escuela de Arquitectura de la Universidad Panamericana, campus Aguascalientes, presentó el taller “Arquitópicos VII: Luis Barragán”, que reunió a todas las generaciones de la Licenciatura en Arquitectura en un espacio dedicado a la creatividad y al análisis de la obra del máximo exponente de la arquitectura mexicana.
Luis Barragán (1902-1988), ícono de la arquitectura moderna, destacó por sus espacios arquitectónicos únicos, caracterizados por el uso de colores vivos, agua y luz. Reconocido con el prestigioso Premio Pritzker en 1980, Barragán dejó un legado internacional basado en su concepto de “arquitectura emocional”. Aunque gran parte de su obra conocida pertenece a las últimas décadas de su carrera, su impacto se extiende más allá de sus construcciones, reflejando su visión multifacética y su habilidad como arquitecto y empresario.
Guiado por la frase emblemática de Barragán, “No vayas a ver mi trabajo, ve a ver lo que vi”, el taller, de cuatro días de duración, combinó teoría y práctica para profundizar en el enfoque del arquitecto. Contó con dos invitados especiales: Enrique X. de Anda Alanís, destacado historiador de la arquitectura moderna mexicana, y Shunichiro Higashi, profesor en la Kyoto Arts and Crafts University y experto en el manejo del color en la arquitectura.
“Este taller, que hemos organizado con grandes figuras y con el tema de Luis Barragán, es de altísima relevancia para nuestra escuela y alumnos, porque este exponente ha sido el arquitecto más importante que ha dado México, con gran prestigio internacional”, destacó Luis Arturo Méndez, decano de la Escuela de Arquitectura.
Durante el evento, Enrique de Anda ofreció una cátedra profunda sobre la trayectoria profesional y empresarial de Barragán, resaltando su aporte único al mundo de la arquitectura: la “arquitectura emocional”. Por su parte, Shunichiro Higashi, quien ha promovido la obra de Barragán en Japón, dirigió ejercicios prácticos para que los estudiantes comprendieran los métodos creativos del arquitecto.
“Si bien Enrique de Anda nos transmitió la parte teórica, el profesor Higashi diseñó una serie de actividades para que los estudiantes experimentaran cómo Barragán lograba esos resultados excepcionales. El objetivo no es que los alumnos copien su trabajo, sino que interioricen el proceso para expresar su propia creatividad arquitectónica”, explicó el decano.
Eduardo Cárdenas, profesor participante, comentó: “Formamos grupos intersemestrales para este taller. Cada trabajo realizado por los 81 estudiantes es único, y eso es precisamente lo que buscábamos: que se adentraran en el mundo del color a través de la perspectiva de Barragán”.
Ezequiel Colmenero, también profesor, añadió que esta experiencia enriqueció su entendimiento arquitectónico, especialmente en el manejo de luces y en el legado de Barragán, además de aportar nuevas herramientas pedagógicas aplicables tanto en la enseñanza como en la práctica profesional.
Conocer a fondo la obra de figuras como Luis Barragán permite a los estudiantes, como futuros profesionistas, transmitir este conocimiento con orgullo y establecer vínculos sólidos con otros arquitectos y expertos de distintas partes del mundo.