Me queda perfectamente claro, Palacio de Gobierno no es el mejor lugar para conciertos, ni sinfónicos, ni de música de cámara, prácticamente de nada, el inmueble es hermoso, pero muy incómodo sin contar con el hecho de que la acústica es muy mala, además, si no consigues un lugar en las primeras filas de las sillas dispuestas para cada concierto, la visibilidad es muy limitada y no se puede disfrutar del concierto como quisiéramos, y como las obras programadas lo exigen, no obstante todo esto, la entrada para disfrutar de este primer concierto especial, digamos, como un paréntesis entre la tercera y cuarta temporada, fue espectacular, había gente incluso en el corredor de la planta alta y esto de verdad entusiasma y las escaleras de Palacio pobladas en su totalidad, justo ahí estaba yo, en la escalinata, lo que me permitía una visibilidad casi completa.
Esta serie de conciertos que iniciaron el pasado domingo 6 de octubre, continuarán por dos domingos más, ya comentaremos al final de esta entrega lo que escucharemos este domingo 13 ahí mismo, en Palacio de Gobierno.
Para esta ocasión, el maestro Revueltas preparó un programa compuesto por dos grandes monumentos para el violín, convocando a dos jóvenes estudiantes de Aguascalientes, la primera obra que se interpretó fue el Concierto para violín y orquesta No.5, Op.37 de Henri Vieuxtemps con la participación del maestro Omar Emiliano Urrieta Ramírez, y posteriormente, una de las grandes catedrales del violín concertante, el Concierto para violín y orquesta No.1. Op.26 de Max Bruch, en este caso el solista fue el maestro Silvio Correa Pérez, tengo entendido que los dos son alumnos de la maestra Magdalena Hernández, concertino suplente de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes, e integrante del extraordinario ensamble Ars Sonui y con una trayectoria pedagógica digna de todo reconocimiento, en lo personal admiro mucho el trabajo de la maestra, como el de todos los integrantes de Ars Sonui que funciona, además, como una suerte de orquesta escuela.
El concierto inició puntual, lo que por supuesto, hay que agradecer, espero de verdad que esta misma tendencia la encontremos en los conciertos de temporada que inician, según tengo entendido, el próximo viernes 25 de octubre en el Teatro Aguascalientes.
Tampoco hubo intermedio, fue un concierto breve, la obra de Vieuxtemps difícilmente llega a los 20 minutos y el de Max Bruch anda por ahí de los 25 minutos, por lo que el maestro Revueltas decidió darle continuidad a la música, lo que también sirvió para que el entusiasmo del público siguiera encendido, y es que la ejecución que hizo el maestro Omar Emiliano Urrieta Rampirez del concierto de Henri Vieuxtemps fue de muy alto nivel de intensidad, y la audiencia que se reunió en Palacio de Gobierno para hacerle los honores a la música terminó aplaudiendo de pie. Evidentemente no es válido apreciar el trabajo de estos dos jóvenes violinistas con los criterios con los que juzgaríamos a un violinista profesional, ellos son estudiantes, y no obstante que su proceso formativo está en franco desarrollo, su respuesta, la de los dos, fue solvente, no se sintieron intimidados, al menos no lo demostraron ante las dos sublimes partituras que les fueron encomendadas, su respuesta fue digna de llamar la atención, desde el momento de aceptar presentarse con una orquesta profesional e interpretando un repertorio como este, vemos si nivel técnico y su compromiso irrenunciable con su majestad la música.
El Concierto para violín de Max Bruch es mucho más interpretado y, consecuentemente, más conocido, seguramente muchos de los que estábamos presentes en el concierto tenemos en nuestra fonoteca personal un par de versiones de este monumento concertante, y tengo la certeza de que el maestro Silvio Correa Pérez lo sabía y sin embargo el compromiso, saber el tipo de repertorio que estaba interpretando, no mermó su capacidad y entusiasmo para lograr finalmente una extraordinaria ejecución. Felicidades a los dos, tenemos la certeza de que se está trabajando muy bien desde los cimientos lo que tendrá que tener resultados muy pronto en el ámbito profesional de la música clásica en nuestro estado.
La próxima semana, en el segundo de los conciertos especiales, tendremos a los músicos de la OSA trabajando como solistas, los próximos dos programas tienen este fin y se llaman “En la OSA también somos solistas”, para ese próximo concierto se ha preparado el siguiente programa: iniciamos con la Obertura El Barbero de Sevilla de Gioachino Rossini, después de la obertura vienen los solistas, primero el maestro Jonathan Wilson, principal de la sección de cornos con la Romanza para corno de Arthur Butterworth, viene después la maestra Margarita Benavides, coprincipal de la sección de violonchelos con la Elegía para cello del maestro Alexis Aranda, él mismo hizo la orquestación. Después la romana del concierto para tuba de Ralph Vaughn Williams con el maestro Wayne Groves oficiando como solista utilizando un Eufonio, también conocido como Bombardino, una especie de tuba con tesitura de barítono tenor, será interesante, por supuesto.
Tendremos después el movimiento lento, andante, de la Sinfonía Concertante para violín y viola de Wolfgang Amadeus Mozart con la participación de Adam Montes al violín y Ricardo Ramos en la viola. Finalmente disfrutaremos del Poema para Flauta de Charles Griffes, obra que le ha sido encomendada a la maestra Megan Maiorana, principal de la sección de flautas de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes.
Esto será el próximo domingo 13 de octubre a las 12:30 horas en Palacio de Gobierno, la entrada es libre, por ahí nos vemos si Dios no dispone lo contrario.