- Solamente somos proveedores de materias primas y de mano de obra baratas
- La mitad de las actividades económicas en el país no están pagando impuestos
El tema de los impuestos es tan complejo en México, de modo que los contribuyentes los están evitando, ya que éstos han provocado que la gente otorgue mucha más información de la que normalmente está acostumbrada a dar. Por ejemplo, en el impuesto de tasa única, se calcula que se recibió tal cantidad y se puede pagar tal, ya que en cuestión de las deducciones estas serán fijas y se dejará de presentar la complicada e inexacta facturación, esto expuesto por el economista, José Luis Gutiérrez Lozano, presidente de la Fundación Ahora A.C.
Lo que ha venido sucediendo en el país es que se ha reducido la base tributaria, lo que significa la disminución del número de personas que pagan, por lo que se vive en uno de los países en donde menos se pagan impuestos, estimando que de la población económicamente activa no más del 9% paga impuestos, algunos porque no son gravables o que el ingreso es tan pequeño que no causa impuestos y otros porque simplemente evaden los impuestos.
Se estima que, según datos del INEGI, aproximadamente entre el 42 y el 50% de la economía está en el sector de la informalidad, lo cual se traduce en que la mitad de las actividades económicas no están pagando impuestos, “esto lo ha ocasionado el no contar con un impuesto transparente, un impuesto único, un impuesto sencillo y fácil de pagar”.
Todos los movimientos relacionados con los cambios de reformas fiscales son sexenales, llegan propuestas de quitar y poner, “lo único que se consigue con estos parches a las leyes tributarias es que cada seis años se crea un Frankenstein nuevo, que viniendo de quien viene y con las aspiraciones que tiene, pues se debe de tomar en cuenta antes de tomar una decisión”.
No existe una mayor demostración de que el sistema viene funcionando mal, simplemente con el ejemplo que mantiene el nivel adquisitivo de los mexicanos, ya que lo único que nos resulta como respuesta a todo esto es que el sistema es disfuncional, “como sistema me refiero a que estamos apostándole a un modelo de economía que ya no funciona, un modelo económico donde nosotros como país estamos siendo proveedores únicamente de la materias primas cada vez más baratas y mano de obra cada vez más barata, a un mundo cada vez más competitivo” .
En México no se ha llegado a una involución en el crecimiento, donde se tenga generación propia de riqueza, ya que se acepta el precio que se impone en cuanto a las materias primas y los salarios, por lo que “consecuentemente estamos entrando en esta carrera inútil de querer obtener más ventas a menores costos y quien los está pagando es el salario”, por lo que se considera que mientras se tenga este modelo de desarrollo, se contará con este deterioro continuo del poder adquisitivo.