- Sólo Martínez, Novales y Herrera en el PAN
- Festeja GAE decisión del PRI
- CLT: Mendoza, “mi ángel de la guarda”
La semana pasada este diario, publicó que el Congreso del Estado tiene ya lista una iniciativa que, en caso de aprobarse, daría independencia a la Procuraduría de Justicia del Gobierno del Estado, es decir, que el procurador no sería más un empleado del gobernador en turno.
¿Qué se ganaría con esto? Pues casi nada, nada más que los ministerios públicos se profesionalizaran, que la Procuraduría contara con autonomía presupuestal; es decir, que siempre una parte predestinada del presupuesto del estado estuviera ya etiquetada a la procuración de justicia, sin necesidad de cabildeos ni limosnas, tal cual sucede con otras dependencias “autónomas” como la Comisión Estatal de Derechos Humanos y el Instituto Estatal Electoral.
Sacamos esto por el rumor que hay en las cúpulas del panismo local, desde donde aseguran que quien vino a destrabar el asunto de Martín Orozco Sandoval en su problema legal fue nada más y nada menos que el director jurídico del CEN del PAN, esto debido a que el afectado solicitó la “opinión técnica” del asunto a su partido. Desconocemos cuál es esa “opinión técnica”, lo que sí sabemos es que aquí los panistas sí hicieron política y pidieron al gobernador del estado, Luis Armando Reynoso, que le ordenara a su empleado, o sea el procurador Edgardo Valdivia, que entregara el expediente al juez.
No podríamos asegurar que con un procurador independiente las cosas hubieran sido distintas, sin embargo, sería más difícil el “manoseo y el manipuleo” de la justicia como en este caso se dio, aunque todos los involucrados en su “meta comunicación” ramplona haya querido vendernos la idea de que nadie metía las manos, según la información oficial y que la denuncia la hicieron los priístas, en el caso de Orozco, cuando todos sabemos que fue exactamente al revés.
Siguiendo con el PAN, parece que ya hay una luz al final del túnel en cuanto a la resolución de las candidaturas, al menos de las diputaciones y de las alcaldías, incluida la de la capital, donde ya es un hecho que la decisión estará entre Fernando Herrera, operador del gobernador del estado y del candidato de éste, Raúl Cuadra; Jesús Martínez, quien ha estado “coqueteando” tanto con el grupo de Reynoso como con el de Orozco y José Luis Novales, quien asegura no ser el gallo de Reynoso para la casa chica, pero los hechos dicen otra cosa.
La ventaja que aseguran los panistas tendría Novales con respecto a los otros dos, es que no tiene equipo; sí, aunque parezca una paradoja; eso permitiría al grueso del panismo colocar gente en el ayuntamiento, es decir, sería un ayuntamiento muy plural, como el de ahora, en caso de que Novales lograra ganar.
Sin embargo, en el equipo de Herrera, aseguran que todo va conforme lo tenía ellos presupuestado y aseguran que el lunes entrante podrían tener una definición en cuanto al futuro de este equipo de panistas.
Donde sí se prevé que se mancharán las manos de sangre (metafóricamente hablando) es en la elección a gobernador, en la que el candidato oficial por el PAN, Raúl Cuadra, tendrá que enfrentarse ya sea al acusado de peculado, Orozco o en caso de que lo inhabiliten, sería Rubén Camarillo el contendiente.
Ayer mismo al mediodía se tenía programado que el CEN del PAN resolviera dar luz verde a la propuesta de método de selección de candidaturas, que, como ya se sabía, será elección abierta a la militancia activa y adherente del PAN en el caso a gobernador y solamente a la militancia activa en caso de las alcaldías y diputaciones.
Como ya es una costumbre en esta columna, pasaremos del análisis de la vida interna de Acción Nacional al de la esquina de enfrente: la del Partido Revolucionario Institucional, en donde ayer se eligió el método de selección de candidatos para la gubernatura y las alcaldías.
Finalmente se impuso la propuesta que impulsó desde hace meses la ex diputada federal Lorena Martínez, y que Beatriz Paredes habría ratificado el pasado viernes, en la reunión que tuvo con los 3 contendientes más fuertes del tricolor al palacio mayor (Gabriel Arellano, Carlos Lozano y la propia Lorena Martínez).
Pero no fue el equipo de Lorena el que asumió como un triunfo la sesión del Consejo Político del PRI del día de ayer, sino el grupo que respalda al alcalde Gabriel Arellano.
Ayer, el “gabrielismo” festejó el hecho de que el senador Carlos Lozano, principal opositor de Arellano, no hubiera asistido a la reunión, ni avalado el método de selección.
En el “gabrielismo”, disfrutaron el desprecio que los Lozano Boys, que dirigen el Frente Juvenil Revolucionario, el Movimiento Territorial, y la CNOP, a nivel estatal, no hayan asistido a la reunión del Consejo Político.
Y aunque Lozano estaba muy ocupado, atendiendo a los invitados de su informe, de los cuales nuestro compañero Mauricio Navarro le entrega a usted hoy una descripción detallada en la página 4, los “gabrielistas” asumieron el evento de ayer como una derrota del senador aguascalentense.
Sus únicos enviados, como Óscar López Velarde, dicen, promovieron hasta el final la idea de una elección abierta, la cual fue desterrada por la cúpula priísta, por el temor a una intervención directa del gobierno estatal.
P.D. Mientras tanto, desde el Quinta Real, el senador Carlos Lozano agradecía a su compañero de escaño, Jorge Mendoza Garza (Vicepresidente de TV Azteca) y lo calificaba como su “ángel de la guarda”.
Aunque sus fanáticos se molesten, son los propios miembros del equipo del senador Lozano quienes han confiado a esta columna que sus principales pilares de apoyo son las televisoras, y el salinismo. Cualquiera que vea la lista de invitados nacionales, podrá entenderlo así.