Se está dando énfasis en el derecho a la salud mental, señalando que ésta consiste en asesoría y atención psicológica a los menores de edad
Siguen bandas del crimen organizado acechando a menores, situación que prende los focos rojos en las instituciones y en las familias, pues se ha detectado que gran parte de este problema es el descuido por parte de la madre y el padre por sus hijos, señaló la titular de la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), Blanca Rivera Río.
Ante tal situación, la funcionaria estatal dijo que en SIPINNA se están redoblando los esfuerzos para atender al sector de la niñez y la adolescencia, señalando que recientemente se lanzó un programa en beneficio de la niñez y la adolescencia, sobre todo, en el cuidado a la salud mental.
Comentó que se está dando énfasis en el derecho a la salud mental, señalando que ésta consiste en asesoría y atención psicológica a los menores de edad, pues, dijo, hace mucha falta en el estado que se refuercen este tipo de acciones.
La funcionaria dijo que lo que más se ha detectado es que lamentablemente se ha perdido la relación y el acompañamiento de los padres con los hijos, donde el llamado es para no dejar solos a los adolescentes: “es un deber y más que eso es nuestra obligación como padres y nos corresponde acompañar a los niños y adolescentes, no decidir por ellos, pero sí acompañarlos”.
Dijo que es importante guiarlos para que ellos puedan ir adquiriendo madurez y que vayan tomando sus propias decisiones, “pero nosotros al lado de ellos, pues este es el principal problema, que nos hemos deslindado”.
Sostuvo que en parte esto se debe a la situación económica, donde tanto el padre como la madre salen a trabajar, por lo que los menores están carentes de autoridad.
Sobre las niñas, niños y adolescentes que están recibiendo atención en la Casa del Adolescente, señaló que no hay un dato fijo de cuántos son los que acuden; sin embargo, comentó que están redoblando esfuerzos e implementando oficios para darles atención a los jóvenes y que puedan formarse y puedan tener una herramienta y una vida digna para que no empiecen a delinquir.
“Es muy preocupante que los grupos del crimen siguen haciendo su tarea de jalar a los adolescentes y ese es el principal problema que se tiene, entonces, se tiene que tenerlos ocupados y con atención propia para su edad”.
Recalcó que lo que se está haciendo es ofrecer muchos talleres en los que puedan desarrollarse y aprender oficios que les permitan salir adelante.