Los dichos y hechos de los últimos meses que hemos presenciado los hidrocálidos sobre el Partido Acción Nacional local, sobre su candidato a la gubernatura y de su líder nacional, César Nava cuya manera de actuar y pactar, resultó poco ortodoxa para los más puros panistas, nos confirma que estamos viviendo nuevos tiempos y estilos, con políticos con poca deferencia hacia el pasado y poco respeto al clásico dedazo de su gobernador en turno.
Y qué decir del PRI, cuyos jóvenes políticos se han desmarcado de sus antecesores dinosaurios, con el fin de no ver afectada su imagen, o de relacionarla con el pasado.
Las nuevas formas de estos políticos jóvenes de cualquier color que se trate, es más práctica ¿quién tiene mayor preferencia ante los ciudadanos según las encuestas? o lo que es mejor ¿quién nos asegurara un mejor resultado?, si esto viene aunado a que tienen que pactar, atosigar y hacer uso de todos los verbos terminados en “ar” no se lo cuestionan, seguramente son representantes vivos de la clásica frase “lo que no esta prohibido, está permitido” y lo hacen sin más ni más.
Lo cierto es que el hecho que tengan poca deferencia y que tengan estilos distintos no es tan malo , lo que es un error, es que olviden que cada partido tiene su propia filosofía política y sus propias doctrinas e idiosincrasia, y que esto no debería pactarse porque entonces los partidos no tendrían razón de ser.
Existe otra variable, que sin duda están tomando en cuenta estos nuevos “WANNA-BE” de la política, que es la más importante, la ciudadanía quien cada día se vuelve más exigente y que ahora sólo vota por necesidad o por un terrible enojo, y esta la otra gran mayoría quien muestra una gran indiferencia o lo que es peor, miedo, por los últimos acontecimientos que se han dado en el país.
Es necesario que alguien haga algo o se pronuncie a favor del VOTO LIBRE Y SIN CENSURA, y que dejen de usar la filosofía del Doctor House que parecen haber aprendido muy bien esta nueva clase politica, con preguntas a la ciudadanía y entrevistas todo el día por radio y televisión, hasta convencernos de su proyecto.
En esto, los ciudadanos indiferentes nos parecemos más a la FILOSOFÍA DE SARTRE, la cual señala según el libro del Doctor House, “que cuando los demás nos provocan sentimientos de ansiedad o antagonismo se debe a que nos privan de nuestro sentido de dominio y primicia,” ya que no hacen necesariamente lo que deseamos porque tienen sus propios planes.
Que no olvide esto cualquier clase de político: EL DOMINIO Y LA PRIMICIA LA TIENEN LOS CIUDADANOS, y deberán cumplir los planes y proyectos del pueblo de Aguascalientes, aunque no sean sus propios proyectos.