- De acuerdo con TMZ, el expugilista, de 37 años, fue detenido por la policía de Los Ángeles, California, luego de que alguien avisó a las autoridades de que podía hacerse daño él mismo o a alguien más por tener un arma en su casa
Este lunes, tras la detención de Julio César Chávez Jr., hijo del excampeón del mundo del boxeo del mismo nombre, por posesión de armas, se avivó en Estados Unidos el debate sobre las armas fantasma.
De acuerdo con TMZ, el expugilista, de 37 años, fue detenido por la policía de Los Ángeles, California, luego de que alguien avisó a las autoridades de que podía hacerse daño él mismo o a alguien más por tener un arma en su casa.
Cuando los policías entraron a su domicilio encontraron un rifle ilegal conocido como arma fantasma.
En 2022, Estados Unidos aprobó una iniciativa de ley para cambiar la definición de arma de fuego. Ahora se incluye como tal a las partes sin terminar de un arma usada para ensamblaje de armamento, como el marco de una pistola o el receptor de un arma larga, para que sean rastreadas con más facilidad.
La norma exige que las piezas tengan licencia e incluyan números de serie. Los fabricantes deben verificar los antecedentes del comprador antes de venderlas, aunque en Texas un juez anuló la orden argumentando excesos de la autoridad del gobierno de Biden.
Pero en agosto, la Corte Suprema falló a favor de restablecer una regulación contra la venta libre y sin reglas para el uso de un arma fantasma.
¿Qué es un arma fantasma?
Son todas las armas fabricadas en Estados Unidos o que son importadas, las cuales están obligadas legalmente a tener número de serie en la parte posterior del armazón, pero un arma fantasma no, se pueden comprar en internet y montarse en casa o imprimirse en impresoras 3D.
Se venden como “kits de arma fantasma”, con todas las piezas y todo lo necesario para construir armas en casa. Pueden ser compradas por cualquier persona sin licencia, como maltratadores domésticos, traficantes de armas, entre otros, sin necesidad de comprobar sus antecedentes, ya que no existe la manera de rastrearlas.
Por eso el gobierno de Estados Unidos ha enfocado sus acciones en combatir el uso del arma fantasma obligando a los fabricantes a hacerlas rastreables.