- En Europa están más acostumbrados a este tipo de intervenciones, incluso las defienden
Apropiarse del espacio con el arte es una experiencia maravillosa, volver el piso una obra de arte aún cuando la gente pase por encima con o sin intención. Lo mismo se crea un dibujo con gis de tercera dimensión que plano, lo importante es atraer la mirada del transeúnte hacia el piso, esa es la gran experiencia de Erwin Scherzer Garza, que lo hizo cambiar su vida de antes por lo que siempre había soñado.
“Esto es mi vida, tengo seis años pintando con gis, desde chico dibujo. Tengo dos negocios en Guadalajara y dejé mis negocios por dedicarme al arte, me fascina, es algo a lo que ya le traía ganas y dije en algún momento de mi vida voy a dejar todo y me voy a dedicar a hacer lo que me gusta”.
Sus negocios de Guadalajara, uno de ellos es una imprenta, el otro es una escuela donde se imparte a través de un sistema de aprendizaje dinámico. En un momento determinado y un tanto impredecible llegó la hora de dejar atrás su vida tranquila y se fue a la aventura para hacer justo lo que siempre había querido.
El hecho de estar dedicado a las ilustraciones hechas con gis en el piso le trajo la posibilidad de viajar, tanto en el país como en el extranjero, conoció ya Francia, Brasil, Argentina y actualmente estaba residiendo en Veracruz, ahora va de paso por Aguascalientes en un viaje hasta Monterrey donde en fechas próximas habrá un concurso de dibujo. “He estado aquí, a mi me encanta Aguascalientes, créeme que es mi fascinación si yo tuviera opción de elegir me quedaría a vivir aquí”.
Hasta ahora no ha estudiado algo relacionado con el dibujo, todo ha sido nato y el propio aprendizaje de la experiencia adquirida a lo largo de seis años de estar en diferentes espacios, a través de la lectura de revistas, libros e incluso al momento de compartir trabajo con otros que se dedican a esto mismo.
El antecedente de su práctica del gis en el piso son los dibujos en la pared, los murales hechos primero con carboncillo, con pintura de lápices y luego con gis de colores, posteriormente se encontró con un amigo suizo dedicado a la pintura de gis en piso, fue él quien de alguna forma terminó por inducirlo a pintar directamente en el piso, hacer al cien por ciento una “intervención urbana”.
“En esto no hay un mañana, uno no puede decir voy a hacer esto y voy a quedarme aquí o equis, depende de cómo lo traten a uno en cada lugar, así es como uno decide”.
Dejar la vida de antes para tomar el riesgo del paso natural de los días a la nada es una cuestión difícil porque de tenerlo todo alguien decide que simplemente deja su casa y su auto para irse sin dinero y con sólo un par de cambios de ropa.
Apropiarse del espacio a través del arte es una maravilla, poder representar una idea en cualquier lugar, presentar una imagen que le guste a la gente, poder hacerla, que de principio te guste a ti mismo, cuando alguien trabaja bien se refleja y eso atrae el gusto de las personas. “Me gusta ver de pronto la calle y decir no tiene nada y de repente verla y decir, fíjate la diferencia, quien pensaría que la gente le está tomando fotos al piso, es una maravilla, es algo bonito hacer que la gente mire para abajo”.
Las pintas con gis en la calle pueden ser planas o en tercera dimensión, para Edwin en México donde no se ha fomentado tanto este tipo de creación es mucho mejor trabajar en un solo plano porque la persona debe estar en un lugar muy específico para captar el punto de vista adecuado del dibujo para fotografiarlo y guardar el momento, de otra forma no se aprecia. Esto no sucede en Europa donde están más acostumbrados a este tipo de creaciones.
El trabajo de calle va generalmente ligado de la cooperación voluntaria de las personas o la venta de las obras creadas, en este caso se da lo primero, ese dinero recaudado sirve como un aliciente para que el artista siga creando, sirve para alimentarse, para comprar más material.
Alrededor del recuadro donde él creaba había una leyenda donde se agradecía a los asistentes el hecho de mirar la obra y también el de no pisarla, aquí en México no siempre sucede que dejen libre el área hay ocasiones lugares o ciertas circunstancias donde sí han pisado su trabajo, otros lugares donde no. En Europa las mismas autoridades ponen vallas para proteger el área donde el artista pinta.