Más que un libro de historia, Cambio y proyecto urbano Aguascalientes, 1880- 1914 es un retrato de aquella época que en mucho ayudaría a entender la ciudad actual, su dinámica económica, cultural, social y también pondría en perspectiva cuáles han sido los avances y cuáles los estancamientos que no han permitido la transformación del estado. Estos fueron algunos de los comentarios vertidos durante la presentación de este trabajo realizado por Gerardo Martínez Delgado desde hace muchos años y que se cristalizó con el apoyo del departamento editorial de la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA).
El autor recordó que hace un tiempo, iba él caminando por las calles de la ciudad y de pronto le surgieron interrogantes que quiso responderse, a partir de ahí comenzó a documentar una etapa de la vida de Aguascalientes desde la historia y los datos que fue recabando y para lo cual tuvo el apoyo de mucha gente que en la noche de presentación recibió su agradecimiento.
Germán Mejía Pavony aseguró que en la mayoría de las ciudades de América Latina pareciera si se hubieran puesto de acuerdo para que la estructura en todas las ciudades fuera similar, sin embargo cada una de ellas tiene su propia personalidad y debe estudiarse de una manera muy específica cada espacio y fue a lo que se dedicó en cuerpo y alma el autor que además de los datos e historias incluyó mapas y fotografías que ayudan a entender mejor el material expresado de manera cualitativa en palabras, a lo largo de cinco capítulos.
El texto aborda temas que se han convertido en medulares para el desarrollo del país como el agua, la estructura productiva del estado que en muchos detalles se repite o es muy similar a lo que hoy sucede en el estado. Este análisis lo realizó uno de los tres presentadores de la mesa Otto Granados Roldán, que empezó haciendo una radiografía de la burguesía de aquella época que representaba una élite, un gueto que se percibía cosmopolita y de muchas formas eran ellos quienes dictaban muchos de los rumbos de la ciudad en esos días.
Los burgueses de aquella época eran un grupo más selecto, cada una de sus relaciones eran por conveniencia, por una búsqueda de identidad y por una idea que aplicaban de proceso de selección anti darwinista, entre ellos se casaban y en muchos casos incluso eran los proveedores de los servicios ya que en el Aguascalientes de esa época muchas cosas eran responsabilidad del capital privado.
A diferencia de la resistencia que existe hoy a que los servicios sean brindados por la iniciativa privada, anteriormente eran los empresarios quienes relegaban al gobierno una función mínima que se limitaba a mantener la convivencia social, para Granados Roldán fue muy efectivo el proceso de aculturación luego de la revolución, donde se planteo la postura del gobierno paternalista, los subsidios y la dependencia de parte de los ciudadanos.
Para el académico esta tendencia aunada a la cuestión económica donde en Aguascalientes todavía se hacen negocios en un ambiente tranquilo, lento y que se ha prestado poco a la industrialización quizá explica el porqué Aguascalientes pareciera haberse estancado.
Estos fueron sólo algunos de los aspectos que llamaron la atención del académico y que propuso como temas planteados en este libro pero que al mismo tiempo pudieran servir como referencia para nuevas investigaciones desde otras perspectivas a manera de continuidad.
En su intervención final el autor confirmó muchas de las apreciaciones que los presentadores habían hecho al momento de sumergirse en este libro, efectivamente es una búsqueda por explicar no sólo aspectos urbanos de la ciudad sino lo que dentro de esta se encuentra entrelazado, además de ayudar para entender qué y cómo son los aguascalentenses y porqué son de esta manera y no de otra.
Aporta una referencia urbana y un retrato del Aguascalientes de finales del siglo XIX
