Era estudiante de La Esmeralda cuando Otto Cázares tuvo un acercamiento por primera vez con el montaje de escenografías y la ópera en sí misma, fue entonces cuando se enamoró de ella, más adelante se dio la posibilidad de compartir sus conocimientos y sensaciones acerca de la que es considerada la manifestación artística más completa. En esta ocasión estuvo en Aguascalientes como invitado especial para el décimo aniversario del foro cultural La Musa.
El entró a La Esmeralda con el interés de estudiar artes plásticas, pero al poco tiempo comenzó a tomar talleres de escenografía, se enamoró primero del teatro y fue su maestra quien lo aproximó luego a la ópera a través de la voz de Cecilia Bartoli; “quedé impresionado con su voz, ese fue mi primer encuentro con la ópera, que se sumó a mi gusto de por sí por el teatro”.
Después de ese primer acercamiento, siguió leyendo sobre ópera,
Cázares empezó a involucrarse en esta manifestación artística y luego
la utilizó como uno de sus temas predilectos para su obra plástica, fue
en ese proceso de análisis y de lecturas próximas que empezó a
descubrir los hilos que estaban contenidos en ella y esperando por ser
desentrañados.
Con esto Otto Cázares confirmó que las artes no son
unidimensionales, sino tridimensionales pues desde un género musical o
pictórico pueden verse otras manifestaciones artísticas que tal vez no
se imaginaron antes. “Todas las manifestaciones artísticas están unidas
en determinados puntos y si logramos descubrir con una sensibilidad
lectora, acústica o visual podemos encontrar esos hilos que lo
conforman y los puntos donde se une la música y la plástica”.
Ese tipo de temas fueron los que captaron la atención de este
naciente artista plástico, lo fascinaron y lo llevó a crear obra
plástica en torno al tema de la ópera, eso como parte de su proceso de
aprendizaje, pero al mismo tiempo Cázares es alguien a quien le gusta
compartir y platicar sus experiencias artísticas, porque si no están
vividas desde la sensibilidad artística y se cuentan, entonces están
vacías.
El artista había escuchado ya con anterioridad el cliché de que la
ópera es la manifestación artística más completa de todas, sin embargo
cuando se aproximó a ella se dio cuenta que era real, al descubrir la
cantidad de disciplinas que convergen en ella, en ese encuentro
maravilloso, de ver una ópera, leer el texto en el que fue inspirada,
ver cuadros que se pintaron a partir de la representación, fue en esa
multiplicidad de manifestaciones alrededor donde encontró la
integralidad.
El porqué es tan poco difundida o se le ofrecen tan pocos espacios,
Otto Cázares comentó que se debe a que es el arte imposible debido a
que para ejecutarlo es necesario un nivel de excelencia en todos los
participantes, el músico, el vestuarista, el escenógrafo, el cantante,
el director artístico, esta excelencia pocas veces se da y además es
muy costoso.
Su propia experiencia de artista desde la plástica le facilitó poder
desplazarse dentro de la estructura de una pieza operística, entrar en
ella y entender los fenómenos artísticos incluidos en ella. El
acercamiento que tuvo en Aguascalientes con los asistentes del Club
Amigos de la Ópera y otras personas interesadas fue muy grato,
consideró que los asistentes eran personas muy frescas, nobles y
abiertas para recibir otras percepciones sobre el fenómeno artístico
que aman y conocen bien, aún sin tener propiamente una formación
académica en torno a la música que muchas veces provoca más bien una
visión acartonada y basada en la perfección de la interpretación y no
tanto en la experiencia sensorial y artística del hecho.