Con la sólida disciplina intelectual que Jesús Terán había adquirido hasta entonces, al enterarse del deseo de los liberales aguascalentenses en el sentido de reformar el programa de estudios del Colegio de Aguascalientes, lo más probable es que se haya interesado por investigar todo lo relacionado con el particular, partiendo de los conocimientos liberales adquiridos en el Seminario de Guadalajara, entre los cuales seguramente se incluía el de las reformas que se habían efectuado en el terreno universitario:
1806 Reforma universitaria napoleónica: Fue en 1806, cuando faltaba menos de un siglo al Sacro Imperio Romano Germánico para cumplir mil años de mantener a Europa sometida al Papa, fue destruido en el campo de batalla por el liberal francés Napoleón Bonaparte, quien no solo demostró que tenía genio militar, sino también capacidad como gobernante para construir un sistema de gobierno basado en la ciencia y la razón.
Y como tal, transformó a Francia tanto política como administrativamente, destruyendo el sistema feudal en el que se encontraba para establecer el nuevo, sobre las bases del liberalismo económico que terminó con los imperios coloniales y desembocó en la aparición de los imperios modernos, que basan su poder en el control de los mercados por medio del capital, de donde se deriva el título de imperialismo capitalista. Y la gran ambición de Napoleón, que consistía en llegar a ser emperador del mundo, no sería posible sin convertirla en el país capitalista más importante y poderoso.
Una de las medidas que adoptó para cumplir ese sueño consistió en reformar totalmente el sistema educativo, porque para realizar una transformación de ese calibre es indispensable preparar a toda la población para comprenderla y adaptarse a ella, ya que es precisamente esa población la encargada de llevarla a cabo.
Pero como ese sistema educativo estaba férreamente controlado por la iglesia de Roma dentro del dogmatismo escolástico en el que destacaba su joya de la corona que era la Universidad, a pesar de que su surgimiento marcó el fin de la Edad Media -pero de la que la Iglesia se adueñó agregándole el adjetivo de Pontificia- a Napoleón no le quedó más alternativa que clausurar la que Roma tenía en Francia.
Y si bien poco tiempo después se vio obligado a restablecer la Universidad que los fieles reclamaban, lo hizo pero sin el carácter de pontificia y sí con la participación de investigadores en el terreno de las ciencias especulativas y de la Naturaleza (matemática, geometría, física, química, biología, etc.,) que produjeran profesionales útiles para el desarrollo económico racionalista del nuevo sistema capitalista, para lo cual creó las escuelas técnicas y científicas que progresivamente fueron adoptadas por el resto del mundo.
EDUCACIÓN SUPERIOR. “Enseñar y formar ciudadanos es un privilegio del Estado.” Así fue como apareció este concepto como una rama de la administración pública, bajo el principio de que, de ser una institución confesional, al quedar bajo el control oficial la nueva Universidad se convirtió progresivamente en una Institución profesional con planes de estudio y títulos controlados por el Estado, cuyo propósito consistió en satisfacer y controlar la demanda del personal especializado que apoyara la necesidad de convertir a Francia en la potencia industrial soñada por Napoleón.
Los Institutos Científicos y Literarios. Esto seguramente lo sabía Jesús Terán porque no solo México sino todos los países de América Latina habían enarbolado la doctrina liberal en la lucha por su independencia y tenían a la Revolución francesa como su bandera ideológica. De ahí que estuvieran adoptando este nuevo sistema mediante la creación progresiva de Institutos Científicos a partir de 1821, pues nuestras naciones tenían mucho que reconocer a la ideología liberal difundida por la Revolución francesa
Y enterado también de que en Zacatecas se había fundado un Instituto de Ciencias unos diez años antes, lo aprovechó para concluir su carrera de Abogado que había quedado inconclusa en Guadalajara, aparte de relacionarse con la clase política zacatecana, Estado del que entonces dependía Aguascalientes a manera de municipio.
Por la unidad en la diversidad
Aguascalientes, México, América Latina