El fenómeno de la contradicción entre formaciones políticas, literalmente nos ha estallado ante los ojos en México. Podemos decir que hace aproximadamente un año, julio de 2022, nuestros “near shoring”/litorales cercanos fluctuaban relativamente serenos, a pesar de rispideces al interior del TMEC, las negociaciones trilaterales avanzaban y el foro público surfeaba sobre una “pausa” política al interior -de aparente latencia-. Esa paz sin sonrisa dejó de ser sibilina -a la Gioconda-, cuando emerge casi del silencio público el colectivo inédito de la sociedad civil, el FCN- Frente Cívico Nacional.
Hasta entonces no aparecía todavía en la escena pública una oposición política vigente y vigorosa que mostrara pulso y respeto; la trastabillante alianza partidista de oposición en los comicios intermedios pasados del 2021, quedó inestablemente parada con marcador de uno a uno, ante el mayoriteo oficialista de la autodenominada Cuarta Transformación. Esta calma chicha cesó ante la manifestación de la multitud ciudadana en las calles. Fue un claro fenómeno de “la multitud en la historia”, y su apellido público es: Frente Cívico Nacional. Dos de estos eventos masivos en defensa del INE, de la democracia y tangencialmente de la SCJN acreditaron sin ambages el surgimiento de un colectivo de la sociedad civil que comenzó a pisar fuerte y claro. La cosa ya no era de un chiste público para “La Mañanera”, el propagandista de Palacio Nacional hubo de acusar su inequívoca presencia, con ataques cada vez más virulentos.
Esa formación inicial, en seis meses, evolucionó a la conformación de un Comité Electoral Ciudadano, CEC, casi en paralelo con la publicación de la alianza ciudadana “Unid@s”, de “Va por México” en que figuran connotados empresarios como el caso de Claudio X. González, Jr. Entre cuyos objetivos centrales ya estaba la realización de una “Primaria” -inédita en México- para elegir al candidato único -emergente desde la sociedad civil-, para contender en el 2024, por la Presidencia de la República.
A este paso decisivo del colectivo original, se sucedió un giro un tanto sorpresivo de hacer confluir la concurrencia de la coalición de partidos (PRI-PAN-PRD), que imponía un nuevo y más complejo esquema que se abandera, al decir del politólogo Sergio Aguayo como: un proceso cerrado controlado por los partidos. Para inconformidad de algunos notables prospectos con posibilidad de jugar en roles centrales -aunque no defeccionaron del aliento renovador dentro del colectivo de la sociedad civil-. La nueva divisa se plasmó en el Frente Amplio por México.
Por la contraparte, la comedia de enredos ya se había urdido desde Palacio Nacional, haciendo detonar el asunto de “las corcholatas”, de manera absolutamente anticipada, notoriamente extemporánea y a todas luce ilegal; aunque haya logrado del INE una relativa paz, al más tradicional estilo pirata, “el derecho de parliar”; en este sentido el Congreso de los Estados Unidos incluye como práctica alternativa la de “filibustear”, al ocupar la más alta tribuna parlamentaria, haciendo uso de la voz de innumerables legisladores con discursos asaz repetitivos, hasta “matar” el tiempo legislativo reglamentario, y así boicotear una pieza legislativa en debate. Morena -bajo el auspicio de su Primer Mandatario- lo ha hecho fingiendo un objetivo estratégico que dice no ser lo que es, o cuya naturaleza no es lo que parece. Cínicamente, no obstante, este oficialismo filibustero señala con dedo flamígero al frente opositor de infringir la Ley Electoral con su modos y tácticas igualmente anticipados, aunque se trate de la formación de un Frente Político que sí está previsto en la propia Ley.
- A) Entrada en escena. – Es esta efervescencia política que súbitamente observamos cómo se subió en la plaza pública, para cancelar el anterior letargo y aparente pasividad de la oposición ante el movimiento oficialista de la 4T. Hoy. presenciamos en México el fenómeno sociopolítico -claramente descrito por nuestro autor de referencia, Peter Sloterdijk- que se caracteriza como “las espumas”. Lo sorprendente de esta imaginativa visión sociológica, es su clarísima eclosión en el contexto y entorno mexicano, de este momento.
Aquí y ahora podemos describirlo como un bullicioso mar de burbujas que están en constante efervescencia, y que en nuestro espacio territorial crecen, se entrelazan, forman núcleos, se separan, se dividen; pero, cuando por causas adversas se ven afectadas debió a la metamorfosis de una atmósfera agresiva, también las vemos decaer, disminuir y fenecer. De lo cual podemos inferir, en la praxis, que toda su vitalidad depende de la buena atmósfera que las acoger y rodear; además de proveerles dinamismos positivos que las fortalezcan y las impulsen a gozar de un pleno funcionamiento. Todas estas son condiciones de posibilidad que se habrán de traducir en un real bienestar social.
Esta analogía de la espuma cobra pleno sentido traída a la práctica, a los hechos vitales: “Un dato real, pero una hechura esquiva al contacto, que al mínimo roce abandona y revienta. Eso es la espuma” (Sloterdijk. Esferas III. Loc. 386). // De hecho, el Comité Electoral Ciudadano, CEC, no perduró//.
Y profundiza: es la miscibilidad de las materias más opuestas lo que en la espuma se convierte en fenómeno. “Tierra, unida al aire, produce espuma estable”. Por el contrario, “agua” unida a aire, produce espuma fluida-húmeda y efímera como la del oleaje del mar y la que se eleva de cubas de fermentación. Esta unión a corto plazo de gases y líquidos constituye el modelo del concepto usual de espuma (Ut supra, Op. Cit. Loc. 392). // Tenemos a la vista el caso de la elección del representante único opositor//:
– El comité organizador del Frente Amplio por México dio a conocer este lunes el nombre de las ‘corcholatas’ que cumplieron con los requisitos y pasaron a la segunda etapa del proceso interno de la oposición para definir a su candidato presidencial (…), en conferencia de prensa se informó que: Xóchitl Gálvez, Santiago Creel, Enrique de la Madrid, Beatriz Paredes, Miguel Ángel Mancera, Silvano Aureoles Conejo, José Jaime Enríquez Félix, Francisco García Cabeza de Vaca, Ignacio Loyola Vera, Gabriel Quadri, Israel Rivas, Sergio Iván Torres y Jorge Luis Preciado. Todos ellos que ahora pasan a la fase de recolección de 150,000 firmas, dispersas en al menos 17 estados del país. Y así continuar el proceso en los foros. Del 4 al 9 de julio recibimos 33 personas interesadas; 20 fueron cortados por no contar con los requisitos. (Fuente: El Financiero, Nacional, Redacción. ´Corcholatas´ del Frente Amplio por México: Estas es la lista de los 13 aspirantes. Julio 10, 2023).
Lamento que se elija el término: ´corcholatas´, además de despectivo no es aplicable al caso opositor que carece de un sólo “destapador” y aquí prevalece lo que en Derecho se llama: “manifestación unilateral de voluntad”. En este primer encuentro confrontacional, en vez de ver salir los resplandecientes sables filibusteros, estamos escuchando las repetitivas tácticas retóricas de Palacio. Una de cuyas primerísimas y altamente prioritarias son las
“etiquetas reduccionistas”, instrumento por demás invocado bajo diversos estilos de “populismo”, uno de cuyos más conspicuos ha sido el de Donald Trump, y que López Obrador utiliza en su aljaba de más venenosos dardos. El primero, de “neoliberales” ansiosos y urgidos de volver a robar los dineros de la Nación; el segundo, movimiento opositor liderado por empresarios de ´la minoría rapaz´; la sorpresiva y ebulliciente aparición de la aspirante Xóchitl Gálvez es filibusteramente reducida a señalamiento de Claudio X. González. Esto y los ecos recitativos de Morena pretenden reducir este surgimiento auténtico de la sociedad civil que hoy -les guste o no- les planta clara y camina con firme paso.
Todos aquellos, entre los que yo me incluyo, que no militamos en un partido político, ni estamos insertos en un club u organización empresarial; pero, que sí creemos en la democracia y sus procedimientos, el respeto irrestricto a la Ley, y a la manifestación libre de nuestra voluntad, repudiamos estas calificaciones reduccionistas y maniqueas, por dicotómicas, absolutistas y excluyentes. Sí hay expresión genuina de voluntad ciudadana, que participamos con esperanza de cambio auténtico en un gobierno sobreviniente que garantice la viabilidad y sostenibilidad de futuro del país total. No aceptamos ser “chamaqueados”, “ninguneados” o simplemente borrados del escenario nacional. ¡Existimos! Y somos un conjunto de “espumas”/fuerzas en común; para eso vinimos al Mundo. Exhalamos nuestro grito de: “Adsum! -¡Presente!
En este punto climático, viene muy a cuento y es notablemente aplicable el concepto de Sloterdijk No.7.- El alethotopo (o mnemotopo). (Ver: Cfr. Esferas III, Capítulo 1. Insulamientos -Para una teoría de las cápsulas, islas e invernaderos-. Opus, cit. Loc. 4392). Las repúblicas del saber. (Gr. Aletheia=verdad). Sólo la mínima parte de todo lo que existe está abierto a la percepción y al saber actual, (Loc. 5898). Un criterio distintivo: – El tráfico fronterizo entre lo público-claro y lo oculto-oscuro troquelan acontecimientos, que “sobrevienen”, pasan y dan que pensar. La diferencia entre proposiciones verdaderas y falsas se funda, por el contrario, en acciones que acaban con éxito (acertadas, apropiadas, concluyentes) o sin éxito (desacertadas, inapropiadas, inconcluyentes). (Loc. 5917). // Resulta evidente que en este punto y a estas alturas del supuesto “régimen de la Cuarta Transformación”, el López-Obradorismo está culminando en acciones sin éxito, y esto habla de falsedad, políticas desacertadas, inconcluyentes y un afán obsesivo -a falta de lo verdadero- por la apariencia, la simulación//.
Dicho lo cual se hace imperativo (el ya citado) criterio rector, -citamos el Modelo Categorial-, (Cfr. LJA.MX- Nota mía: Política verdad. Viernes 09 de junio, 2023). / – En el lenguaje de nuestro ensayo la interpretación de la espuma ha de negociarse bajo el nombre de poliesferología, o ciencia ampliada de los invernaderos. (Esferas II, Globos”. 2004. Loc. 564). Por lo que no puede quedarse en mera hermenéutica, ni detenerse en el desciframiento de signos. Efectivamente, estamos pasando a la acción.
- B) Desenlace. – “¿ESTAMOS NEGOCIANDO? – ¡Siempre!” Parlamento climático que pronuncia Keanu Reeves, “el abogado” (Kevin Lomax), ‘hijo del diablo’, (John Milton), personificado por Al Pacino, en el film: “El Abogado del Diablo”, (Taylor Hackford, U.S.A., 1997, basada en la novela de Andrew Neiderman). Pregunta crucial que nos remite directo a la escena política actual de México. Una que está siendo agitada al ritmo de los primeros huracanes que, después de un calor infernal en todo el territorio, están avanzando hacia nosotros este verano. Del llano en llamas, pasamos a las aguas encrespadas. Del aparente silencio y pasividad, pasamos a la acción y combatividad.
Pero, para poder hacerlo exitosamente tenemos que maniobrar la herramienta de la Negociación Positiva. Entre múltiples opciones de modelos, cito al autor David E. Berlew, 1984, (Profesor del MIT) y creador de Situation Management Systems, Inc. Plymouth, Massachusetts, EUA. El cual en esencia distingue los estilos de influencia positiva de las personas que negocian, del objeto y proceso mismo de la negociación. Ambos merecen estudio y consideraciones aparte antes de negociar. Ambos merecen estrategias, tácticas y acciones propias a su respectiva naturaleza; una es la necesidad de persuadir inteligente y convincentemente, y otra es satisfacer mis necesidades mediante el intercambio de bienes y valores que aprecio como justos y equivalentes.
Y lo traigo a colación, porque lo que está en juego para México, sin solemnidades ni estridencias, es su posibilidad y capacidad de convertirse en un entorno capaz de albergar la vida y sobre todo proteger y cuidar la vida humana, en común; hoy puesta en grave riesgo por la violencia, las condiciones azarosas de la economía y el propio entorno mundial. La oposición política de la que hablamos tiene horizonte de posibilidad sí y sólo sí opta por negociar. Genuina y técnicamente eficaz. Dante Delgado líder de MC, Movimiento Ciudadano debiera re-enfocar su estrategia electoral y no excluirse por principio, pues la confrontación actual no anticipa una figura triangular, sino una esferoidal hemisférica, ¿a qué bloque favorecería?
El dramatúrgicamente aprendido “quid pro quo” (ceder una cosa por otra) es válido, pero infinitamente inferior en posibilidades que un auténtico acto negociador. Las divisas “de oro” en un intercambio no son las que más pesan en metal o en dinerario, sino verosímilmente aquella, fruto de una estimativa con valor 0 para mí, pero de inmenso valor para el otro, porque ¡satisface sus necesidades! “¿ESTAMOS NEGOCIANDO?”