Ivan Vladimir Reyes Delgado, presidente del Colegio de Economistas, manifestó que más allá del mensaje de aparente calma que el presidente Felipe Calderón lanzara en días pasados, argumentando que lo peor de la crisis ya pasó; advirtió que el próximo año también será difícil, debido al déficit de crecimiento de 7 por ciento de este año y de 3 por ciento en el 2010, sumado a la falta de poder adquisitivo a la que se enfrentará la población con las nuevas reformas fiscales.
Sobre este tema manifestó que lo aprobado por el Congreso de la
Unión, fue “un parche” y que las reformas hacendarias de fondo no se
han dado, vaticinándose un panorama no muy alentador en la economía del
país y de los mexicanos. “Va a ser un crecimiento mediocre, la
actividad económica no se verá muy activa, no es cantar victoria, es un
año 2010 complicado tanto para los inversionistas como para la gente,
con un crecimiento nulo”, apuntó.
Al respecto profundizó que las reformas hechas en materia fiscal
sólo fueron el resultado de la premura de los legisladores por tapar un
inmenso boquete fiscal que se vino gestando desde hace tiempo, y que al
final del día lo aprobado no abonará al crecimiento de la economía, de
la inversión, el empleo, por la falta de cambios estructurales, que
permitan al país invertir en temas prioritarios como la educación de la
población, elevando el nivel de competitividad.
Reyes Delgado resaltó que independientemente de la noticia de
Calderón Hinojosa del término de la recesión, se están dando otros
indicadores que apuntan a que las cosas no son tan positivas como el
presidente lo manifestó. Un ejemplo de ello dijo es el índice de
confianza del consumidor que llegó en 2009 a su nivel más bajo
históricamente, lo cual se suma a la falta de liquidez de los
ciudadanos, que de acuerdo a los expertos en la materia económica el
próximo año estarán consumiendo todavía menos.