- Este mes habrá de definirse a la nueva titular
- Se espera que sea una persona con capacidad, preparación y experiencia comprobada
Será la Junta de Gobierno del Instituto Municipal de las Mujeres de Aguascalientes (IMMA) el ente que habrá de definir a la sucesora de Zayra Angélica Rosales, quien ocupó la dirección durante la administración de Teresa Jiménez Esquivel y una parte de la actual de Leonardo Montañez, hasta que terminó su periodo.
El alcalde explicó que si bien no se habla de una persona en especial para ocupar el puesto vacante, confío que hay mujeres con la preparación suficiente para continuar con la dirección del IMMA, adelantó que será en este mes cuando se dará a conocer a la nueva titular de este organismo público descentralizado (OPD).
Recordó que el artículo 98 del Código Municipal señala qué se debe hacer en caso que alguna dependencia quede acéfala, ya sea por ausencias definitivas o temporales, lo que significa que se queden sin una persona responsable como encargada de despacho.
El alcalde hizo la distinción del nombramiento de los titulares de las dependencias que dependen de manera directa de él y el procedimiento a llevarse a cabo para las OPD, como es el caso del IMMA, para el cual deberá reunirse la Junta de Gobierno para definir el mecanismo para el nombramiento de la nueva titular.
La ratificación de Rosales Tirado en la dirección del IMMA para esta administración fue fuertemente criticada por varios colectivos feministas que consideraron que los cinco años frente al Instituto fueron de simulación en cuanto a políticas públicas encaminadas al respeto y reconocimiento de los Derechos de las Mujeres, Niñas y Adolescentes del municipio de Aguascalientes, además de calificar su trabajo como precario debido a la falta de experiencia y preparación previa a tomar el cargo.
Se señalaron varios de los programas implementados por el IMMA encaminados a tratar de prevenir la violencia hacia las mujeres, como el llamado Botón Naranja y Punto Seguro, por carecer de estrategia
También fueron criticados los programas, mal llamados políticas públicas, como el de Agente Rosa, Policía Rosa y el cambió el nombre de la Unidad de Atención Integral a las Violencias de Género y Familiar (UAVI), política pública implementada en el trienio de Lorena Martínez, por asa Rosa de la Mujer, perpetuando estereotipos de género. “En cinco años no hay nada que pueda probar de manera sustantiva en programas contra la violencia, nada que no sea con el discurso”, señalaron en su momento tras un comunicado los colectivos, por lo que ahora la expectativa es que la nueva directora sí tenga experiencia, capacidad y preparación que respalde el nombramiento.