- De las cuatro contralorías internas revisadas en municipios, ninguna cumple cabalmente con su labor
- OSFAGS hizo 56 observaciones a las contralorías revisadas, 55 no fueron solventadas
Para el combate a la corrupción, los órganos de control interno de los municipios desempeñan un papel fundamental pues son los encargados de fiscalizar, vigilar y evaluar el gasto público. En otras palabras, es quien certifica la correcta aplicación de los recursos disponibles, así como el desempeño de la entidad, la eficiencia y la economía.
Precisamente para el ejercicio de auditorías realizado por el Órgano Superior de Fiscalización de Aguascalientes (OSFAGS), en relación al ejercicio fiscal 2021, revisó el desempeño de las contralorías municipales de Asientos, Calvillo, Cosío y Tepezalá. Es necesario puntualizar que durante dicho año se dio la transición de los gobiernos municipales, en ninguno de estos municipios se reeligió el presidente municipal que estaba en turno.
Para todos los casos se analizaron los indicadores de indicadores de resultados que le competen a la contraloría establecidos en el Matriz de Indicadores de Resultados (MIR) y la rendición de cuenta que desplegó durante el 2021
Para el caso de las cuatro dependencias, Asientos, Calvillo, Cosío y Tepezalá, el OSFAGS concluyó que incumplen en su labor por lo que hay una deficiente rendición de cuentas y presencia de corrupción e impunidad.
Recomienda a las contralorías que se hagan prontas mejoras en la investigación y sustanciación de las faltas administrativas hacia el gobierno municipal, así como tener apertura a recibir denuncias que interpongan los servidores públicos y, en caso de ser necesario, sancionar a los responsables.
Especifican que la Contraloría Municipal de Asientos de Aguascalientes no cumple con lo que mandata la ley sobre la vigilancia y transparencia del fondo del erario, pues tienen un “conocimiento parcial de sus funciones y nulo compromiso para orientar el desempeño de los servidores públicos”.
En Cosío y Calvillo señalan que no cumplen con las facultades que se les otorga en el código municipal ni con el reglamento interno que rige sus labores.
Entre las cuatro contralorías, el OSFAGS emitió 56 observaciones, de las cuales 55 quedaron pendientes a solventar y para las cuales se emitieron las recomendaciones correspondientes.