- En el 2019, este helicóptero entró a un “mantenimiento especial”; cuando salió de reparación se dijo que podría funcionar por otros 12 años
- Cada seis meses se le daba mantenimiento, informó gobernadora
Aunque de acuerdo a las autoridades estatales, el desplome del helicóptero Águila 1, que derivó en la muerte de cinco elementos de seguridad, entre ellos el secretario de Seguridad Pública de Aguascalientes, Porfirio Sánchez Mendoza, se trató más bien de un accidente, la misma gobernadora Teresa Jiménez Esquivel, dio a conocer que realmente la aeronave sí había sido verificada e incluso se le había dado mantenimiento recientemente.
En rueda de prensa, la gobernadora dio a conocer que el helicóptero sí tenía seguro, y en la póliza se advierte que cada seis meses se le daba el mantenimiento pertinente, de hecho, confirmó que la última verificación se hizo en septiembre del 2022, es decir, hace dos meses.
“Constantemente estamos revisando los helicópteros, o sea, estaba en regla todo”, comentó la mandataria en la rueda de prensa que se llevó a cabo en la mañana posterior al hecho.
Horas más tarde, Manuel Alonso García, quien ahora fungirá como secretario de Seguridad Pública Estatal, confirmó que el suceso que destruyó por completo al Águila 1 y que les quitó la vida a dos artilleros, un capitán y el piloto, sí fue consecuencia de un accidente.
En un video compartido a los medios de comunicación a través del grupo de información del gobierno estatal, Alonso García dijo: “podríamos descartar que tengamos alguna evidencia de que se haya llevado a cabo algún atentado en relación a la aeronave”. Agregó, que llegaron a esa conclusión porque desde el vehículo aéreo no hubo comunicación con el c5 que advirtiera de que estuvieran lidiando con un conflicto armado.
En el video mencionó que no se encontró mensajes o comunicación que advirtieran de un atentado.
Águila 1, estaba renovado y podía funcionar por otros 12 años
No solamente el helicóptero había sido verificado recientemente, sino que este había entrado a un “mantenimiento especial” en el 2019, mismo que duró ocho meses y a partir del cual se aseguró que podría operar sin problema alguno durante otros 12 años.
De acuerdo al boletín de prensa que difundió la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, entonces a cargo también de Porfirio Sánchez Mendoza, “que este mantenimiento especial requirió de un proceso de cerca de ocho meses, necesarios para verificar cada una de las piezas de la aeronave, algunas de las cuales tuvieron que ser sustituidas por el desgaste natural que ya presentaban”.
Fue en abril del 2020 cuando se avisó que ya estaba listo, y desde entonces retomó sus operaciones tras estar detenido en una revisión exhaustiva.