- Desde la perspectiva de la directora del Inmujeres el aborto es cuestión de salud pública
Tanto las mujeres del Distrito Federal, como las de Chihuahua, Sonora o Aguascalientes, deben tener el mismo acceso al derecho de elegir si quieren o no ser madres, es un principio de igualdad que no puede darse de manera desigual de acuerdo a las “condiciones” de cada entidad porque finalmente este es un derecho humano fundamental con el que no se pueden hacer distinciones. Una mujer que decide interrumpir de manera legal su embarazo no puede, ni debe ser una criminal en algún estado de la República, comentó Malú Micher, directora general del Instituto de las Mujeres (Inmujeres) en el Distrito Federal.
“Yo me pregunto porqué a las mujeres con los mismos derechos, en Torreón, en Aguascalientes, en Guanajuato, en el Distrito Federal porqué se nos trata de manera distinta, porque se agravian nuestros derechos. La mejor iniciativa debe ser la que mejore el estado de las cosas”.
Bajo este principio de mejoría, si las mujeres están muriendo por practicarse un aborto clandestino, hay que avanzar en la profesionalización de los servicios a través del estado porque esta situación es ya una cuestión de salud pública. “El artículo cuarto constitucional es muy claro, toda persona tiene derecho a decidir libre, voluntaria e informadamente sobre el número y espaciamiento de hijos”.
Desde el inicio de esta nueva legislación donde en el Distrito Federal está ya permitida la interrupción legal del embarazo, se han atendido alrededor de 74 mil mujeres para realizarse esta práctica, sin embargo son más de 80 mil quienes han pedido información. Esto es un reflejo del derecho a decidir con el consentimiento informado, es decir primero se dota a las mujeres de toda la información y luego ellas toman una decisión.
La legislación es incluso una alternativa donde se dan opciones para las mujeres que por alguna razón están poniendo en duda la posibilidad de traer una vida más al mundo, una de ellas es tenerlo, otra es tenerlo y darlo en adopción y la tercera es interrumpir el embarazo hasta las doce semanas porque después de este plazo ya se considera un aborto de acuerdo a los cálculos naturales del crecimiento del embrión.
Un aborto implica para una mujer un trastorno en toda su vida, su proyecto de desarrollo, la vida conyugal, personal, profesional y maternal. “Nadie está de acuerdo con el aborto, pero es un problema de salud pública, es muy problema muy serio que está regulando el gobierno de la Ciudad de México, porque ahí si se considera a las mujeres como seres con derechos”.
Criticó fuertemente la actitud de la lidereza del PRI a nivel nacional, Beatriz Paredes. “Se disfrazó de feminista, se metió en nuestras filas, se hizo de izquierda, ¿que hizo? nos mintió y dijo que había respetado el derecho de los diputados y diputadas a que libremente decidieron, así que si ahorita deciden meter pena de muerte a los menores infractores por ejemplo, ella va a respetar la libertad de sus diputados y diputadas… por favor, a otro perro con ese hueso”.
Brindar información para el desarrollo de una salud sexual y reproductiva de las mujeres es una obligación del estado, para dar servicios de anticoncepción de emergencia, de educación sexual a través de ciertos suplementos impresos muy en específico para las mujeres porque para Micher el tema de la sexualidad es una cuestión de género.
“Como somos niñas no se nos habla de nuestro cuerpo, no te toques, no preguntes y como nuestros órganos genitales no se ven, pues lo que no se ve, no existe, es lamentable (…) las mujeres somos educadas en la represión y en el silencio”.
En este sentido, Nora Ruvalcaba como candidata a la gubernatura por el PRD impulsará una estructura de educación sexual, desde las niñas, las adolescentes y a todas las personas sin distinción desde una perspectiva científica sin que intervengan cuestiones religiosas para fomentar el conocimiento y sobre todo el cuidado del cuerpo hacia sí mismas y cuando tengan una relación sexual.
Para fortalecer la educación sexual y reproductiva hace falta la inclusión de textos dentro de los libros que los niños utilizan dentro de la formación académica donde se habla de las partes del cuerpo y se explican los procesos del desarrollo sexual. Si estos libros no son proporcionados por la federación, entonces el mismo Estado deberá ser quien se encargue de editar unos ejemplares adecuados a esta necesidad.
Desde la perspectiva de Micher, es totalmente falsa y una estupidez aquella teoría donde se sostiene que al hablar de sexo se propicia a los niños a tener contacto con este mundo, cuando en realidad no funciona de esta manera. Hay que hablarles a los niños y a las niñas de sus cuerpos, de las funciones reproductivas, del derecho al placer como algo natural y no como algo pecaminoso porque eso no rige un Estado laico.
El PRD tiene muy claro que la principal alianza para trabajar reformas tan importantes como la defensa de la libertad de las mujeres a decidir sobre su cuerpo es la sociedad civil y los centros educativos. “Tiene que escuchar a la sociedad civil incluso a la conservadora, pero también hay que saber argumentar, hay que sentarse con la sociedad que está científicamente informada”.
Los derechos de salud reproductiva y sexual forman parte de una idea de integralidad de derechos de las mujeres donde se contempla la cuestión laboral, de servicios de salud, educación. “La postura de Nora es integral con las mujeres, es decir, una vida libre de violencia, un derecho a la planificación familiar, un derecho al trabajo, al empleo, a beneficiarse del desarrollo económico y social y quien crea que el tema de Nora es solamente la interrupción legal del embarazo está muy equivocada”.
Otro aspecto importante es la transversalidad del tema de género para cada una de las iniciativas.