Se lograron reunir más de 10 mil libros en 45 minutos con motivo del kilómetro del libro organizado por las autoridades municipales, rompieron un récord en tiempo y también en cantidad porque hubo varias cajas de libros donadas por las universidades que no se incluyeron dentro del conteo porque ya estaban incluso clasificadas para cada biblioteca.
“Fue algo rapidísimo, la gente llegó con un montón de libros, la universidad llegó con quince cajas más o menos que era una caja para cada biblioteca, el rector de la Universidad Tecnológica de Aguascalientes me parece que llevó como ocho cajas de libros”.
En ninguna de las ocasiones anteriores se habían logrado reunir la cantidad necesaria para cubrir el kilómetro en tan poco tiempo, en realidad además de las instituciones educativas que donaron acervos grandes, las personas una a una fueron llevando parte de lo que seguramente eran una colección en su casa y se deshizo de uno o de varios. Según César Diz, presidente de libreros de Aguascalientes incluso hubo gente que fue en los dos días anteriores a comprarse un libro de segunda mano exclusivamente para cooperar con la kilómetro del libro.
Comentaron las autoridades fue un tiempo récord habían reunido la misma cantidad de libros de los años anteriores aún sin abrir las cajas donde estaban las donaciones de las universidades porque eso ya venían incluso clasificados para las diferentes bibliotecas. “Se considera que se rebasó el tope con menos tiempo y con mayor cantidad de libros”.
De principio fueron esos primeros 10 mil libros que conforman la meta inicial para llenar el kilómetro, sin embargo la realidad es que todavía al medio día llegó gente buscando donde poner sus libros o a quién dárselos porque los ejemplares del kilómetro ya los habían levantado, estas entregas se hicieron ya directamente con personal del área de cultura del municipio que se quedaron pendientes por cualquier situación. La referencia de libros reunidos el año pasado fueron 10 mil 200 en aproximadamente una hora.
Hubo gente de todas las edades haciendo donaciones, tanto personas enteradas de la actividad como los mismos empleados del ayuntamiento de diferentes direcciones quienes cooperaron e incluso asistieron al momento del inicio oficial del kilómetro de libros, donde estuvieron también regidores entre ellos obviamente María Esther Pérez Pardo quien es la representante del área cultural.
En cuanto al nivel de venta de libros, en general estuvo regular pero César destacó que en el kilómetro había libros de los que ellos tenían en sus puestos, es decir hubo quienes compraron sólo con el pretexto de la donación para las bibliotecas. Para ellos estar en este espacio más que utilidad por las ventas es una oportunidad para promover la lectura y la compra del libro.
“Usualmente los libreros que vamos, no vamos tratando de pensar en las ventas, aunque sí nos preocupamos por ellas pero podemos en realidad promocionar la librería, el libro, acercarnos a los lectores para poder acercarlos posteriormente a las librerías, además de entregarles folletos con una lista de las bibliotecas municipales, las ventas no fueron gran cosa”.
Aún así los libreros analizaron la posibilidad de poder estar al menos una vez al mes en este lugar para promover precisamente este rollo de la lectura, sin embargo en consenso consideraron que no es tan conveniente saturar a las personas porque luego se logra el efecto contrario. Durante el año los libreros en conjunto con las autoridades tienen planeados cuatro eventos y para ellos es suficiente.