- Con financiamientos federales y de la ANTAD
- Se instalará una planta tratadora de aguas residuales
El gobierno del estado donaría a la Unión Ganadera Regional General Hidrocálida (UGRH) un terreno para la construcción de un nuevo rastro Tipo Inspección Federal (TIF) con el que, entre otros objetivos, se cumpliría el de transformar el esquema tradicional de sacrificio de ganado bovino en otro más moderno que garantice su calidad, permitiendo a los ganaderos del estado acceder a apoyos federales y otros beneficios para su actividad, como parte de un programa de colaboración en el que también participaría el gobierno federal.
La solicitud que el ejecutivo estatal envió al Congreso, contempla que el rastro se construya “en el terreno rústico de Santa Cruz de la Presa” con una extensión de 193 mil 829 metros cuadrados, siendo el 60 por ciento de ellos área aprovechable para todas las fases del sacrificio.
El documento establece que “sería necesaria una planta de tratamiento de agua” y que “ya se cuenta con la autorización del Instituto del Agua del estado de Aguascalientes (INAGUA) para desarrollar e invertir en la instalación de la obra con cargo”, que asegura ya está listo para licitar bajo la denominación “Planta de Tratamiento de Aguas Residuales Rastro TIF de la Unión Ganadera Hidrocálida Aguascalientes”.
De acuerdo con el proyecto presentado a los diputados, el proceso contempla la utilización de tecnologías para la inocuidad de los productos cárnicos, que se comerciarían “con una mayor certeza en la solvencia del pago por parte del comprador” con los miembros de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), cuyas tiendas afiliadas les darían además un sobreprecio de 32 a 33.50 pesos el kilogramo de carne, además de que permitiría a los miembros de la UGRH el acceso a financiamiento por parte de las tiendas de autoservicio y a los subsidios de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA) de 200 pesos por cabeza.
Además de crecer la cantidad de reses sacrificadas mensualmente de 3 mil 360 a 4 mil 800 del primero al décimo año de operación, la matanza en este tipo de rastro permitiría a los ganaderos participar como proveedores confiables en los Estados Unidos, Canadá y Japón. La operación del lugar, se asegura, generaría 28 empleos directos y 418 indirectos relacionados con la actividad pecuaria, “evitando con ello la continua emigración de personas” a la Unión Americana.
De acuerdo con la solicitud, el proyecto del nuevo rastro cuenta ya con los resultados de un estudio de factibilidad técnica, económica, financiera y ambiental y se trata de “un proyecto estratégico que le dé valor agregado a la producción pecuaria de sus agremiados” y cuyo impacto económico superaría las 70 mil cabezas de ganado al año que se registraron en 2009.