Aguascalientes capital, cuenta entre su infraestructura cultural con el Museo de Aguascalientes, que alberga la obra de artistas patrimoniales como el pintor Saturnino Herrán y el escultor Jesús F. Contreras; por otro lado, el Museo José Guadalupe Posada, resguarda y exhibe la obra de este emblemático grabador. Sin embargo, no se cuenta con espacios museísticos o políticas públicas que promocionen desde el arte, el patrimonio natural y ambiental para la creación-producción-investigación y su puesta en valor.
De conformidad con el Sistema de Información Cultural, del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Conaculta, (2021), México cuenta con 1404 espacios museísticos, entre los que se distinguen una amplia variedad de tipologías, gestionados desde la titularidad estatal, municipal y privada, así como colecciones privadas, en cuyo universos se incluyen, aquellas entidades que se consideran como museos, de acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas, para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Unesco, y en el contexto del patrimonio natural, como son los Jardines Botánicos y de Ciencias Naturales, que albergan colecciones y especímenes provenientes del entorno natural que son investigados, preservados y expuestos.
En la actualidad, el estado de Aguascalientes cuenta con 27 museos y 27 galerías, destinados al arte, la ciencia y a la museología social, siendo la mayoría de gestión gubernamental, encontrándose también, los de corte universitario, y los menos, privados y alternativos. Cabe mencionar que, de este universo, únicamente cinco museos (comunitarios), se encuentran fuera de la capital, más una galería.
Por otro lado, desde la educación no formal, existen varios centros de enseñanza de las artes y los oficios, centros de creación y estudios musicales, literarios, un taller nacional de gráfica, orquesta sinfónica, teatros, sala de conciertos, más una universidad de las artes, que tiene por misión la formación de profesionales a nivel licenciatura y posgrado en los campos de las disciplinas artísticas como la música, teatro, danza, artes visuales, la educación artística, el arte contemporáneo y la conservación y restauración del patrimonio edificado.
La infraestructura cultural gubernamental, en su mayoría da cabida preferentemente a las clases medias en el estado; además de los espacios citados arriba, se encuentra una parte del Complejo Ferrocarrilero Tres Centurias y una importante red de bibliotecas públicas por todo el territorio estatal.
Como se señala arriba, existe una variedad de museos y galerías, estatales, privadas o comunitarias, que promueven la cultura material e inmaterial, la historia, las ciencias, la biodiversidad, el arte patrimonial nacional o las nuevas tendencias; de igual manera, también, se encuentran las casas de cultura en cada uno de sus once municipios con sus respectivas extensiones de animación cultural en varias comunidades.
Por lo anterior, Aguascalientes en cuanto a infraestructura, es considerada como una de las entidades federativas más importantes de México, aun así, no siempre sé es acorde a la dimensión territorial y la cantidad de habitantes, ni a la necesidad de transformarse ante las inercias y la capacidad de responder a las demandas de la sociedad en materia de servicios artísticos, culturales y educativos, no obstante el contar con una ley de cultura que aún no ha logrado permear e impulsar la cobertura de los beneficios a amplios sectores de la población.
En paralelo se observa, que los servicios culturales continúan concentrados en la zona centro de la ciudad capital, dejando fuera de la oferta educativa y cultural a la mayoría de la población que vive en las colonias y fraccionamientos populares habitacionales denominados dormitorio, la cual es la de menores ingresos, en condiciones de vulnerabilidad y pobreza, que estarían por arriba de 59% de habitantes en esas zonas.
Por otro lado, de conformidad con el investigador Daniel Nava Ruvalcaba, en contraste con la zona poniente de la ciudad, ésta cuenta “…con más del 80% del equipamiento económico, de servicios urbanos, religiosos, administrativos, educativos, de salud, cultural, deportivo y recreativo de la ciudad”. Tan solo el municipio de Aguascalientes, capital, cuenta con 947, 216 habitantes, que representa 66.47% de la población total del estado en el año 2020; “la desigualdad y la pobreza son la cara de una misma moneda”, por lo que es importante el reconocimiento de los contextos económicos, sociales y culturales, para que las políticas públicas en la materia sean acordes a las necesidades y características.
Existe entonces en ese tenor, un área de oportunidad, para que la institución rectora de la cultura en el estado y la municipal, fortalezcan y reorienten su política cultural para atender a la población, pero ya no con base al modelo tradicional de casas de cultura que ha permeado durante más de medio siglo a todo el ecosistema cultural y de enseñanza.
Este paradigma se erige sobre una visión y prácticas culturales educativas, que es necesario se corresponda a las nuevas realidades, que las descolonialice y dé continuidad a los modelos educativos, como el constructivista, ensayados en algunos espacios institucionales, a través del cual se respeta la personalidad, la autonomía, la libertad, se fomenta la colaboración y el ritmo de aprendizaje de quienes se acercan a experimentar un proceso de creación artística y cultural, de manera individual o grupal con base en las capacidades particulares de cada persona.
Programas y acciones que vayan más allá de la instrucción tradicional de las bellas artes, que la institución salga a la calle, ya que poco o nada les dicen a los grupos que han sido marginados por generaciones ante una visión que a pesar de los esfuerzos emprendidos continúa siendo centralista, para avanzar hacia otra, que pondere con mayor acento la cultura material e inmaterial de las comunidades y de los diferentes conglomerados humanos, que apoye la puesta en valor, y que, a su vez, continúe la promoción de la cultura de paz y de inclusión, entre una población del estado cada vez mayor y más heterogénea.
A lo anterior debe considerarse, redoblar la profesionalización y atender las endebles condiciones laborales de los docentes en los centros de enseñanza, además de una disociación y falta de inclusión a nivel estatal de las artes y la cultura, en el currículo de la educación pública, ya sea básica, media o superior, que forme a individuos y públicos sensibles, que aprecien el arte y la cultura, desde una visión crítica, emancipadora y descolonizante.
Que la sociedad sea autogestiva de su propia cultura, que decida qué recuperar, rescatar, conservar, qué crear, recrear o qué transmitir. En ese sentido las instituciones culturales deben alejarse de la política de llevar eventos artísticos y ‘educativos’ en artes. Al respecto, cito a Guillermo Bonfil Batalla, quién sostiene que: “…el común de los mortales debe ‘elevarse’ a los niveles donde está la cultura y, en correspondencia, se hacen esfuerzos para ‘llevar la cultura al pueblo’, así la cultura no es un patrimonio común ni tiene que ver con la vida cotidiana, con el quehacer que ocupa día tras día a la mayoría de la población”.
Apoyar la creación de ‘industrias culturales y creativas’, es una vía, consensuando con las comunidades sobre sus intereses y necesidades, para mediar y trabajar en ellas desde una base social, que armonice sistémicamente el desarrollo económico, ambiental, social y cultural, poniendo especial acento en la promoción de proyectos tanto de aquellos que se enmarcan en la llamada economía creativa o naranja, así como también, la social y solidaria, que expresan su compromiso con el entorno, la sostenibilidad ambiental, la generación y creación de empleos dignos del sector cultural; además, fomentan la equidad, la cooperación sin fines de lucro individuales, al tiempo que fortalecen prácticas del patrimonio inmaterial, a saber, conocimientos, saberes ancestrales, usos y costumbres, su transmisión y recreación, entre otros.
Las encuestas sobre prácticas, hábitos y consumo cultural, y uso del tiempo libre de la población, son una herramienta que apoya en la planeación e implementación de las políticas culturales, ya que permiten conocer esos aspectos e incrementar el acceso e inclusión de la sociedad a los bienes y servicios culturales, en caso de existir la visión y la “voluntad política” y el presupuesto que le dé operatividad, más otros programas de capacitación pedagógica permanente y profesionalizante para el personal docente y de gestoría, así como condiciones laborales favorables; además el suministro, el equipamiento y la infraestructura, son nodales.
Con el importante apoyo de la Secretaría de Cultura de gobierno federal, se llevan a cabo diferentes programas entre otros como el Programa de Acciones Culturales Multilingües y Comunitarias, PACMyC, Red Nacional de Bibliotecas Públicas, Alas y Raíces, Programa de Estímulo a la Creación y Desarrollo Artístico, PECDA, la incorporación del estado al Programa Nacional de Escuelas de Educación Artística, Encuentro Nacional de Arte Joven, el Premio Nacional Aguascalientes de Poesía, Bienal Internacional de Grabado, Feria del Libro, encuentros dancísticos, de teatro, música y canto. Igualmente, se encuentran también “…proyectos para difundir los diferentes acervos artísticos, realizar coproducciones, propiciar la movilidad del sector cultural e integrar espacios educativos y culturales a circuitos artísticos que promueven la reflexión sobre la vida social del país a través del arte con las expresiones locales”. (INBAL, 2019).
Recientemente, el gobierno del estado, a través del Instituto Cultural de Aguascalientes, viene gestionando con la Unesco, varios programas que desde “…el impacto de la cultura como motor y catalizador de procesos de desarrollo sostenible”, apoyen a generar nuevas posibilidades de la puesta en valor de los patrimonios natural y cultural, material e inmaterial, a través de las industrias creativas y de la conservación del capital natural de las comunidades. Entre los proyectos se encuentran, la inscripción a la figura de Geoparques Mundiales de algunas zonas geográficas del estado, que son lugares conformados por paisajes naturales y culturales que, por su relevancia geológica, permiten promover el desarrollo de las comunidades mediante el cuidado y su puesta en valor. Se encuentran también en este ámbito, los programas, Ciudades Creativas, y Paisaje Urbano Histórico, entre otros.
La trascendencia que posee para la sociedad la cultura material e inmaterial y la educación artística es preponderante para el estado y la región, como lo es el papel que desempeñan la Feria Nacional de San Marcos, desde 1828, así como el Festival de las Calaveras, creado éste durante la década de los años noventa del siglo pasado, en materia de atracción turística, comercial, cultural y artística, pues se dan cita en ambos foros, expositores tanto locales, como nacionales e internacionales, de diversas manufacturas, bienes y servicios, así como un extenso programa cultural y de las distintas manifestaciones del arte y de la cultura popular.
Sintetizando, diré para terminar este apunte, que resulta oportuno poner en práctica un instrumento que dote metafóricamente de los cinco sentidos a la institución rectora de la cultura, para que ésta, esté en condiciones de percibir y conocer la situación actual del ecosistema cultural en el estado, herramienta en el cual apoyarse para la creación de las políticas públicas culturales pertinentes y distintivas, con mayor impacto y dimensión social a través de las cuales, se diseñen y pongan en práctica de manera inclusiva y de calidad los programas y las acciones en materia, valorizando la función de la cultura para un desarrollo sostenible alineados a esos objetivos.
Septiembre de 2022