- Colocar botones de pánico en el transporte público y notificar a las autoridades para su pronta atención es uno de los objetivos de la propuesta
- Este tipo de violencia vulnera el derecho de tránsito de las niñas y mujeres y, por lo tanto, al libre desarrollo
De entre las iniciativas que se analizó ayer en la Comisión de Transporte Público se encuentra la presentada por la diputada Yolytzin Alelí Rodríguez Sendejas con la que busca reformar tanto la Ley de Movilidad como el Código Penal en materia de violencia hacia las mujeres dentro del transporte público.
La diputada perteneciente al grupo parlamentario del partido Movimiento Ciudadano expone que el atender la violencia que sufren las mujeres al abordar un transporte público, ya sea camión, taxi o plataformas de transporte, ha sido un tema pendiente de los gobiernos. Aquellas políticas que se han enfocado en la delincuencia en estos espacios carecen de una perspectiva de género.
Señaló que este tipo de violencia vulnera el derecho de tránsito de niñas y mujeres y, por ende, también limita su derecho al libre desarrollo de la personalidad. De ahí la necesidad de que se implementen estrategias para prevenir, atender y erradicar la violencia de género en el transporte público.
Con esta iniciativa también propone establecer como agravantes en las sanciones y penalidades derivadas de la conducta delictiva que se cometa en estos espacios. Propone la instalación de botones de pánico en el transporte público y la obligatoriedad de contar con un sistema de geolocalización para la pronta atención
Tras el estudio de la propuesta, la diputada presidenta de la Comisión de Transporte Público, Mayra Guadalupe Torres Mercado, comentó que se le notificaron algunos cambios que habría que hacerle a la propuesta para que pueda ser dictaminada a favor.
Señaló que dentro de la propuesta de la diputada también contempla el obligar al transporte privado escolar a utilizar botones de pánico y sistemas de geolocalización, sin embargo, la legisladora dijo que este no puede ser considerado como público pues es un servicio que se centra de manera particular en los padres.