- “Proyecciones” de la pobreza en 51% se han mantenido
- La mayoría no contaba con servicios que ahora ya tienen
Para el término del presente sexenio, 28 comunidades de muy alto nivel de marginación en Aguascalientes “van a pasar a alta o media marginación (
) que era lo que nos interesaba”, gracias a la atención que el gabinete social les ha brindado, afirmó ayer la secretaria de Desarrollo Social del estado, Beatriz Cañizo Cosío, afirmando que esto se verá reflejado en los resultados que arroje el censo de población que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) aplique a partir del próximo mes.
A un día de que el Banco Mundial calculara que 50 por ciento de la pobreza de América Latina son mexicanos, la funcionaria que recién regresó a su cargo tras pedir licencia el pasado 4 de abril, afirmó que los niveles de pobreza en el estado “se han mantenido” en un 51 por ciento general y sin comparación en cuanto a medición multidimensional; cuestionada sobre la razón de que no hayan disminuido, justificó que se trata de mediciones que “son proyecciones, más que (datos) reales”, insistiendo en que “necesariamente” en el levantamiento del censo se observará menos pobreza.
De acuerdo con información proporcionada por la propia secretaría, se trata de las comunidades “Los Dolores”, “San Nicolás de En medio”, “La Ahuja”, “Rancho El Pirul”, “El Yerbaniz”, “Lomas del Guarda”, “Loma San Judas Tadeo”, “El Potrero”, “Cumbres V”, “Ejido Venustiano Carranza” y “San Miguel”, en Aguascalientes.
También se encuentran en la lista “El Zorrilo” y “La Cinta”, en Asientos; “Miguel Hidalgo”, “El Ocote” y “El Charcote”, en Calvillo; “Loma de la Soledad”, en Cosío; “Buenavista”, “El Chaveño”, “Bajío de las Liebres”, “Escalera La Lagunita” y “Tanque La Viznaga”, en Jesús María; “Ejido San Francisco” y otra localidad sin nombre en Pabellón de Arteaga; “Coplamar” y “Rancho Los Rosales” en Rincón de Romos; “Ejido Cieneguita” y “Maximiano Domínguez”, en San José de Gracia.
Cañizo Cosío indicó que en estas localidades viven cerca de 600 familias, que representan alrededor de 2 mil 400 personas y que gracias a la intervención de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso), el DIF estatal, el Instituto de Salud (ISEA) y otras dependencias “ya cuentan con servicios que antes no tenían”.
En el listado de comunidades proporcionado se observa que sólo tres contaban con transporte dentro de la localidad y ninguna con un centro ni casa de salud propios; ocho con alumbrado público, una con teléfono público seis con agua potable y seis con recolección de basura. Dos comunidades contaban con jardín de niños y primaria, pero ninguna contaba con secundaria y bachillerato; sólo una contaba con expendio de abarrotes, mientras que el resto podía acceder a ellos una vez a la semana o acudir a otras localidades a abastecerse de víveres.
Afirmó que además, a través de los programas de Sedeso, a los pobladores de estos sitios se les ha brindado atención médica y educativa por parte de las demás entidades gubernamentales y que además de atender a éstas, se ha apoyado a otras que presentaban niveles de alta y media marginación, cuyo progreso, subrayó, también se reflejará en los resultados del censo.