- Lo primero es resguardar a las víctimas y después los trámites burocráticos para denuncias
- Sólo habrá que esperar que se tengan disponibles los recursos para la construcción y apertura de estos centros
El Instituto Municipal de las Mujeres de Aguascalientes (IMMA) está conformando un proyecto para la apertura de módulos de atención inmediata a víctimas de violencia. La idea es que puedan estar en las oficinas de las diferentes delegaciones para funcionar los fines de semana que son días en los que generalmente no hay atención especializada en los espacios destinados para las víctimas y son indispensables, comentó Patricia Ramírez de Lara, directora de este instituto.
Aunque por lo pronto la estructura gubernamental no tiene la posibilidad para brindar una atención de albergue, la idea es poder ofrecer una atención intermedia e inmediata donde las personas se sientan “protegidas” luego de un momento traumático. Es de alguna forma rescatar a alguien que está siendo violentado para evitarle mayores riesgos y después darse tiempo para las respectivas averiguaciones, que son también necesarias, pero no vitales.
“Para pensar en un albergue como Mujer Contemporánea para eso se necesita tener un espacio de esta naturaleza, hay que pensar en muchas otras cosas, hay que buscar un recursos que se etiquete desde las cámaras para que se sostengan ese tipo de albergues”.
A través del IMMA no pretenden suplantar las actividades del DIF o de alguna otra instancia encargada de la atención de las mujeres, este es en realidad un paliativo inmediato
De antemano ella sabe que el proyecto es muy ambicioso y está en búsqueda de recursos económicos para financiarlo porque es finalmente una necesidad urgente crear estas presencias. Ella se dio cuenta de esta necesidad mientras estuvo laborando en el DIF, era pan de cada día que llegara gente violentada, mientras pensaban a donde podían enviarlo, le hacían un estudio socioeconómico y la crisis se les “pasa” mientras se discute sobre trámites burocráticos.
El Ministerio Público es un lugar frío lleno de gente que entra y sale, son lugares insensibles que en nada ayudan a las personas violentadas, eso sin contar con todo el trámite que ellas y ellos deben hacer para presentar una denuncia.
“De ahí sale la idea de buscar como instalar módulos de atención para fines de semana que es cuando más se presentan casos de violencia, son temporales porque finalmente el estado no puede hacerse cargo de todo, pero se le puede dar la víctima un espacio por 48 o 72 horas, mientras rápidamente se busca algún familiar que nos ayude a resolver la situación”.
El personal de estos módulos serían jóvenes universitarios de servicio social o prácticas profesionales vigilados por personal del instituto con la finalidad de hacerlos funcionar en menor tiempo, a través de ese apoyo que ellos podrían brindar durante los fines de semana completos.
El respaldo jurídico para el funcionamiento de estos módulos lo dan las modificaciones al código municipal donde se especifica la protección inmediata que el estado debe brindar de manera inmediata a las víctimas de violencia y que esto no sea tipificado como una falta a la ley.
La idea es tener una sala de estar donde haya especialistas, psicólogo, médico, un lugar donde haya unas cobijas para que las personas víctimas se sientan tranquilas.
Sin embargo, todavía está pendiente la realización de estos proyectos debido a la necesidad de recursos económicos para la apertura y funcionamiento de cada uno de estos centros.