- Luego de 22 años de permanecer al margen, ya las ven
Después de un tiempo de ser ignoradas, las organizaciones se volvieron capital político para los candidatos a un puesto público, este proceso costó engaños y desengaños pero sigue en proceso el crecimiento de la relación entre el gobierno y la sociedad. Además de este logro para Verona Valencia García, coordinadora del Centro de Capacitación para el Desarrollo Comunitario (CECADEC) es muy importante que las mujeres independientemente del partido al que pertenezcan alcancen un puesto de largos alcances de poder
Al principio de los casi 22 años de existencia, de CECADEC, los candidatos a algún cargo público no tomaban en consideración a las organizaciones civiles conforme las mismas organizaciones civiles dieron a conocer su trabajo a través de los medios de comunicación o dando su opinión sobre temas coyunturales, eso provocó que los políticos voltearan la mirada hacia ellos.
Este inicio de contacto con los políticos fue muy “chistoso” porque cuando recibían alguna llamada, ellos decían “ahora sí vamos a poder hacer y conjuntar esfuerzos para tratar de proponer las soluciones, éramos nosotras muy inocentes y muy ilusas”. Esto comentó Valencia García, incluso propicio que los miembros de las organizaciones les “hicieran el caldo gordo” a algunos candidatos en algún proceso de pre-campaña o campaña de diferentes partidos.
Conforme avanzaba la concepción social de la ciudadanía y los gobernantes, las elecciones y el cumplimiento de las promesas, las organizaciones empezaron a ocupar un lugar distinto.
En lo general todavía permea que las organizaciones pueden acercarse a quienes aspiran a un cargo público por conocer a gente cercana a ellos y se da un rasgo de compañerismo no como un ejercicio público- político. “Nosotros pasamos de ser utilizadas, completamente ignorante de este trato, luego pasamos al ejercicio de decir vamos a hacer nosotros nuestras peticiones”.
Vino un boom, los candidatos empezaron a buscar a las organizaciones civiles, iban a nuestros lugares, a las oficinas, se comprometían a todo, incluso hasta les firmaban documentos, Martín Orozco escuchó todas las peticiones que ellas tenían, pasó y a la hora de la hora no sucedió nada. Cuando todos llegan al ejercicio del poder público se olvidan de la existencia de las organizaciones civiles.
Precisó también que en el tiempo que ellos llevan al frente de la organización es hasta esta ocasión donde han tenido la posibilidad de acercarse a una mujer interesada en contender por un cargo público, e independientemente del partido al que ella pertenece para Valencia García, poder tener una candidata es una oportunidad de oro. “Aguascalientes merece y las mujeres merecemos tener un espacio de ese nivel que pueda mostrar cuales son los avances de la mujer, el sentido social que hace tanta falta”.