- Estos dispositivos lucen cada vez diseños más atractivos y una variedad de sabores que atraen a nuevos consumidores
- Ante la baja de consumo de cigarrillos, la industria tabacalera se ha enfocado en publicitar los vapeadores
Ayer las organizaciones civiles Red de Género y Medio Ambiente y Comunicación, Diálogo y Conciencia (Códice), presentó el informe del monitoreo del cumplimiento de la Ley de Protección contra la Exposición al Humo del Tabaco del Estado de Aguascalientes donde asistió la doctora Guadalupe Ponciano Rodríguez de la Universidad Nacional Autónoma de México.
En su exposición, destacó que la industria tabacalera ha encontrado un mayor interés de producir cigarrillos electrónicos y vapeadores ante la baja en ventas que han tenido como consecuencia de las campañas de prevención. Estos dispositivos resultan más atractivos para captar a nuevos fumadores.
Además, desde la pandemia del covid-19, han violado de manera constante el artículo 16 de la Ley general de control de tabaco que prohíbe la promoción y patrocinio de cualquier producto que contenga nicotina. Especialmente a través de las redes sociales se han promocionado más estos nuevos dispositivos.
De acuerdo con la última edición de la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (Encodat), la edad promedio de inicio para el consumo de tabaco es de 13 años y precisamente esto se ve impulsado por la publicidad en redes. La especialista comentó que, al no tener los pulmones bien desarrollados, las afectaciones por el tabaco en niños es muy grande.
Son ya varios años en los que se tienen vapeadores en el mercado, cada vez lucen diseños más atractivos para el consumidor, sin embargo, el líquido utilizado para estos dispositivos puede resultar más dañino que un cigarro tradicional.
“En las etiquetas no trae siquiera la cantidad de nicotina que contiene, y eso es muy grave. Se ha encontrado que algunos líquidos pueden llegar a tener hasta 60 miligramos de nicotina, un cigarro tradicional tiene 1 miligramo de nicotina. En ese líquido tan inocente puede contener la cantidad de nicotina correspondiente a 60 cigarros”, alertó.
Estos dispositivos contienen propiglenglicol y etilenglicol, ambos utilizados comúnmente para cosméticos y medicamentos; también poseen saborizantes y colorantes, algunos de ellos están demostrados que pueden provocar cáncer. Níquel, plomo y cromo son con lo que se fabrican estos vapeadores y con el calor se van diluyendo e ingresan en el organismo.