La orquesta como entidad musical es, sin duda, uno de los grandes acontecimientos en la siempre inconclusa historia de la música. Con el surgimiento de la orquesta a mediados del siglo XVIII los lenguajes musicales y las posibilidades de la música se ampliaron inmensamente, con la orquesta aparece, evidentemente, la figura del director quien define cómo debe interpretarse cierta obra o algún tipo de repertorio específico. La orquesta, por sus propias dimensiones, no puede tocar sin la presencia del director, él es la autoridad máxima que decidirá todo lo que suceda al interior de esta entidad musical y marcará el curso que deba seguir.
Para los melómanos que llegamos al teatro o sala de conciertos a ocupar nuestra butaca y nos disponemos desenfadadamente a disfrutar de la audición sin otra preocupación que la de dejarnos seducir por los encantos de su majestad la música, nos resulta ajeno todo el trabajo que fue necesario realizar para que ese concierto que disfrutamos pudiera llegar a buen fin, sin embargo tenemos que tener en cuenta que para poder estar ahí, en el patio de butacas de ese sagrado recinto llamado sala de conciertos, fue necesario que un grupo de personas, no solo los músicos que integran la orquesta, tuvieron que sortear una buena cantidad de dificultades, lidiar con muchas dificultades burocráticas y, claro, también artísticas, para que no solo el concierto pudiera realizarse, sino también para el buen funcionamiento de la orquesta.
Con el fin de conocer todas esas cosas que suceden en el trabajo de oficina y del que evidentemente no estamos conscientes, al menos no el grueso del público que es asiduo asistente a los conciertos de una orquesta, el ingeniero Salvador Meza, quien durante muchos años desempeñó la función de ser gerente de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes, nos lleva a la intimidad del trabajo de oficina con la publicación de un libro en donde nos muestra todo eso que ignoramos y que por supuesto es interesante saber y que sin duda, nos hará disfrutar más de un concierto sinfónico, el libro lo escribió en tiempo de pandemia y esta misma situación dificultó la presentación de esta publicación que se llama Una orquesta para todos, tuve la oportunidad de leer el primer borrador que generosamente el autor me compartió. Después, cuando pude leer el libro ya publicado observé con agrado que Salvador lo había agregado muchas cosas que son de interés común y lo enriqueció sensiblemente.
En este libro llamado Una orquesta para todos tenemos la oportunidad de enterarnos de las gestiones y negociaciones que hay que hacer para contratar solistas, directores huéspedes, estirar el presupuesto, la contratación de partituras, hay muchas obras por las que todavía es necesario pagar derechos, el contacto cotidiano con el personal del teatro, evidentemente con los músicos y director titular con quien hay que trabajar en el diseño de una temporada de conciertos considerando el presupuesto con el que se cuenta, la contratación de extras si esto fuera necesario dependiendo del repertorio que se pretenda interpretar. Y en el caso de las giras el trabajo se hace mucho más demandante, aunque las giras sean en la misma ciudad, hay que ocuparse del transporte, del traslado de los instrumentos de una forma segura, de que todo esté a tiempo, de checar la acústica del lugar, ver si es necesario instalar equipo de sonido. Y en el caso de giras fuera de la ciudad el gerente de la orquesta tendrá que encargarse de que los músicos y todo el personal cuente con los viáticos necesarios, hacer las reservaciones del hotel, ocuparse de los traslados, considerar la nada remota posibilidad de algún retraso en el transporte, en fin, es un mundo de cosas que los que vamos a los conciertos no tenemos en cuenta.
Generosamente, y obedeciendo a una inquietud que yo considero natural, Salvador Meza nos comparte su experiencia durante los años que fue gerente de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes. Al leer el libro te aseguro que podemos comprender muchas cosas que nuestra hedonista posición de espectadores, de público, no nos permite ver o que simplemente no tomamos en cuenta, pero al poder acceder a la intimidad de los manejos que se dan al interior de una orquesta, y más en este caso que es a nuestra propia orquesta, podemos apreciar más el trabajo de esta noble institución y por supuesto, disfrutar más de la música, porque además, Salvador nos propone un repaso por algunos instrumentos musicales, aquellos que son parte de esta maravillosa entidad llamada Orquesta, ya sea sinfónica o filarmónica, es lo mismo, no hay variante en la cantidad de músicos que la integran, eso obedece más a cuestiones presupuestales, tampoco hay diferencia en el repertorio, sinfónicas y filarmónicas abordan en mismo contenido.
La presentación del libro Una orquesta para todos de Salvador Meza tendrá lugar este sábado 26 de marzo en salones del hotel Fiesta Inn Patio al sur de la ciudad de Aguascalientes a las 19:00 horas, la presentación estará a cargo del maestro Román Revueltas que durante 12 años fue el director titular de la OSA y ahora viene a dirigirla como huésped. También presentará el libro el maestro Sierra Moncayo que en más de una ocasión ya ha estado al frente de nuestra Sinfónica y el maestro David Pérez Olmedo quien se encargará de los conciertos didácticos de nuestra máxima entidad musical. En lo personal agradezco la generosidad de Salvador Meza al invitarme también ser parte de la presentación. Por ahí nos veremos si Dios no dispone lo contrario.
