En la delegación del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), ya están en espera de las vacunas para la influenza estacional, mismas que deberán de llegar para el mes de octubre, cercana a ocho mil aplicaciones; mientras que los antivirales dirigidos al virus A/H1N1 aún no cuentan con fecha exacta de su arribo, sin embargo, hay algunos en existencia y estarán aplicándose en primer lugar al personal médico, informó la delegada en el estado, María del Carmen Campos Soria.
La aplicación de la vacuna de la influenza estacional deberá de estar enfocada en sectores como el infantil, la población mayor de 60 años y las madres embarazadas con la intención de proteger al producto. Subrayó que la delegaciones están coordinándose con el sector salud del estado y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) con el fin de establecer las directrices en el combate a un rebrote de influenza.
En la repartición de dotaciones son precisamente el sector salud y el IMSS los que perciben mayores dosis, esperando que en el caso de presentarse un requerimiento más por parte del ISSSTE pueda dotársele oportunamente.
“La vacuna que esperamos nosotros va a ser en todo momento suficiente, para la población que nosotros esperamos tendrá afluencia a nuestra institución”, recordó que por una instrucción del ejecutivo habrá atención en las instalaciones del ISSSTE a las personas que presenten los síntomas de influenza aunque no estén dentro del padrón de derechohabientes.
Sostuvo que “no habrá desabasto de vacuna, no habrá desabasto de medicamento”, comentando que ya hay también la orden de que en el caso de haber una sospecha, se aplique de manera inmediata el medicamento y no estén esperando a corroborar la enfermedad con los estudios del Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (INDRE), porque habría una pérdida de tiempo importante y crucial para la sanación de la persona.
Vio ésta como una desventaja en la primera contingencia sanitaria, considerando que con esta actividad podrá disminuirse el número de contagios, “porque primero esperábamos la prueba y después aplicábamos el medicamento”.
Enfatizó en que durante la pasada emergencia de influenza en la delegación del ISSSTE en el estado no se presentó “ningún caso” de influenza A/H1N1.
En cuanto a la infraestructura médica contó que ya están también trabajando en las medidas de prevención, sobre todo en torno a la pauta que daban a los enfermos para ingresarlos al área de hospitalización, porque anteriormente estos eran internados de forma inmediata, sin embargo, en esta ocasión deberán de proporcionarse mayores síntomas con el objeto de que el paciente no sufra de un contagio mayor en el nosocomio.
“Los pacientes que ameritan hospitalización son aquellos que requieren respirador, sino son pacientes ambulatorios que podrán tener su convalecencia en casa con las debidas precauciones”; aprovechó para determinar que en situaciones de menores de edad la temperatura sobre de forma espontánea, hay llanto inconsolable y está acompañado de diarreas.
Apuntó que actualmente el ISSSTE cuenta con siete casos sospechosos en tratamiento y dos hospitalizados, “son personas que traían un problema crónico con enfermedades pulmonares”, siendo estos los pacientes más complicados en el ataque al virus de influenza.