- A nadie le conviene una autoridad electoral débil, había advertido el consejero presidente, Luis Fernando Landeros
- El Congreso ya aprobó el presupuesto de egresos 2022, al IEE se le etiquetaron cerca de 31 millones menos que lo que había solicitado
- En el 2021 el instituto tuvo que pedir ampliación presupuestal porque no le alcanzaban los recursos
Haciendo caso omiso al llamado que en su momento hizo el consejero presidente del Instituto Estatal Electoral (IEE), Luis Fernando Landeros Ortíz, sobre considerar la complejidad del próximo proceso electoral, el 23 de diciembre la LXV Legislatura aprobó el presupuesto de egresos del estado donde se prevé un recorte de aproximadamente 31 millones de pesos a lo previamente solicitado por el órgano autónomo.
“Ningún proceso electoral puede ser comparado uno con otro y no va en función del número de cargos a elegir”, había advertido Landeros Ortíz, antes de que se aprobara el presupuesto, ya que sería un “gravísimo” error pensar que la elección para gubernatura del 2022 es más simple que la del 2021.
Sin embargo, de acuerdo a una revisión realizada por LJA.MX del dictamen aprobado para el presupuesto del siguiente año, para el 2022 el IEE contará con un presupuesto de 86 millones 247 mil pesos, lo cual es 30 millones 753 mil pesos menos a los 117 millones que desde octubre el instituto electoral había planteado que necesitaba para poder funcionar correctamente en las elecciones con las cuáles se definirá al o la sucesora de Martín Orozco Sandoval.
Este suceso no es único en su tipo, en el 2021 sucedió lo mismo: para este año, desde el 2020 el IEE había realizado un proyecto donde se solicitaba un presupuesto de cerca de 136 millones de pesos, de los cuales, a fin de cuentas, la LXIV Legislatura solamente aprobó 83 millones 755 mil pesos, y por lo cual el órgano tuvo que pedir después más presupuesto al gobierno del estado así como usar dinero del segundo semestre dentro del primero para poder sacar avante el proceso electoral.
Con este contexto, Landeros Ortiz hizo el llamado para que estos diputados no cometieran el error de etiquetar menos de lo solicitado. “A nadie le conviene una autoridad débil, a nadie le conviene una autoridad frágil presupuestalmente”, advirtió antes de la aprobación.