- Aumentará la depresión y ansiedad en personal médico sin acciones por parte de la Secretaría de Salud
- Es importante que todo personal médico esté bien mentalmente para dar una atención adecuada
Margarita Pérez, psicoanalista, comentó que uno de los derechos laborales y sociales de trabajadores de la salud en el estado tienen derecho a tener un periodo de desintoxicación, periodo de descanso que se toman quienes trabajan en áreas donde hay altos niveles de estrés como en áreas de emergencia, psiquiátricos.
Estas prestaciones aplican solamente para personal de base y del estado, en el sector privado son prácticamente nulas las prestaciones en torno a la salud mental.
Sin embargo, no se está considerando quienes están fuera de estas áreas, por lo que hay poca atención en lo que concierne a la salud mental. Además, incluso entre el personal de salud aún existen estigmas sociales sobre el ir al sicólogo: “Llevo casi treinta años trabajando en el Issea y veo como a los médicos les sigue costando trabajo aceptar que tiene un padecimiento mental”.
La especialista resaltó que, aunque la Organización Mundial de la Salud reconoce diagnósticos como la ansiedad y la depresión, estos no son dignos para tener un permiso por incapacidad, ni siquiera en momentos detonantes de momentos más graves como la muerte de un familiar.
También resaltó que hay altos niveles de alcoholismo y adicciones en el área de salud que podría ser reflejo de la poca atención que reciben en salud mental.
Es común ver como la mayoría del personal de salud está ausente en sus familias pues se ven obligados a trabajar en jornadas largas.
El síndrome de burnout, que se caracteriza por un cansancio físico y emocional extremo, pudiendo ser reflejado en depresión o ansiedad, es algo común en todo el personal de salud. Este padecimiento ha repuntado con la pandemia del covid-19. Para que un personal pueda dar atención adecuada, deben de estar bien mentalmente: “Todo este personal de salud ha visto a gente morir diario, tras todo lo que hemos vivido, se vendrá una ola de depresión y ansiedad en todos los médicos y enfermeras. ¿Y qué está haciendo el personal de salud? Es un nivel de estrés brutal”.