- Regulación de licencias, implementar arresto a vecinos ruidosos y fortalecer el área
- Entre 40 y 50 negocios trabajan con un giro diferente al de la licencia
Entre los temas pendientes que se heredarán a la administración de Leonardo Montañez se encuentra la regularización de las licencias, las quejas semanales en contra de los altos niveles de ruido que generan los vecinos y su factible arresto, así como fortalecer esta área con más verificadores, manifestó David Ángeles castañera, encargado de la Dirección de Reglamentos del municipio capital.
Observó que hay lugares que funcionan con un tipo de licencia diferente a la verdadera actividad del negocio; en esta situación han detectado al menos un medio centenar de casos, lo cual expone a los dueños de los establecimientos a que se les levante constantemente un acta por cambio de giro, “ese podría ser un pendiente, regularizar las licencias al giro que realmente se está trabajando”.
Detalló que existen cuatro mil 500 licencias reglamentadas, y otras tres mil 500 licencias especiales, entre ellas se encuentran los antros, bares, cantinas, hoteles, tiendas de abarrotes, vinos y licores, centros comerciales, hostales, entre otras, inclusive las farmacias.
En cuanto a los negocios que trabajan con un giro diferente al de la licencia son principalmente restaurantes, se contabilizan entre 40 y 50.
Destacó que otro asunto a heredar es la constante de las quejas por el exceso de ruido en las casas cada fin de semana, por eso han estado trabajando con la Comisión de Reglamentos y Mercados del Cabildo, para modificar y adecuar la ley a fin de que el ciudadano entienda que no debe molestar a sus vecinos o a todo el conjunto habitacional donde vive.
“Yo he insistido que inclusive el Código Municipal considera el arresto, pero ahora debemos meternos al tema de cómo implementarlo; por fortuna ya nacieron los juzgados cívicos que dependen de Justicia Municipal, y por ese lado vamos a tener esa parte de coordinación para poder realizar este tema”, manifestó.
Otro de los pendientes es reforzar el área de Reglamentos con más verificadores, pues a partir de la pandemia muchos colaboradores tuvieron que irse a su casa, motivo por el cual sólo 30 a 35 trabajadores debían atender todo el trabajo que requiere en este aspecto la ciudad capital.
“Ahora que está cerrando la administración se ha reforzado un poco y hemos podido atender las quejas, principalmente de ruido en casa-habitación, esos serían los tres pendientes que pudiera yo platicar con el alcalde electo”, manifestó Ángeles Castañeda.