- Se necesitan, al menos, tres mil 500 millones de pesos
- El Gobierno Federal recortó los recursos, dice titular de la Secretaría del Medio Ambiente
Aunque se sigue con el proyecto de saneamiento del contaminado Río San Pedro, el director de la Secretaría de Sustentabilidad, Medio Ambiente y Agua (SSMAA), Julio César Medina Delgado recordó que dados los recortes por la autodemonimada “austeridad republicana” del presidente Andrés Manuel López Obrador no hay recursos suficientes para poder avanzar en esa actividad.
“Como sabemos, el Gobierno Federal recortó prácticamente todos los recursos para el ramo medioambiental”, dijo Medina Delgado. Estimó que se necesitan cerca de tres mil 500 millones de pesos para el saneamiento oportuno de todo el Río San Pedro, así como para la instalación de los colectores marginales y para la reparación del ya existente, “los cuales la Federación pues no está en posibilidad de otorgar”.
El titular de la SSMAA añadió que si bien no se cuenta con ese recurso, el Gobierno del Estado sigue trabajando, dentro de sus posibilidades, para continuar con el proyecto de saneamiento: “Ha sido instrucción del gobernador que no dejemos de atender al Río San Pedro, por lo que todas las dependencias del gobierno del estado tienen distribuido una fracción del Río San Pedro, y constantemente están acudiendo a hacer actividades de limpieza, retiro de basura”.
Si bien no se cuenta el presupuesto adecuado para poder limpiar y cuidar debidamente del Río, el gobierno estatal ha hecho otras inversiones millonarias, como la del nuevo lienzo Charro, en el que se invirtieron 200 millones de pesos para que este fuese la sede del próximo Congreso Nacional Charro.
También durante esta administración se han construido numerosos puentes a lo largo y ancho de la ciudad, no sólo vehiculares, sino también peatonales, mismos que si bien se presumen como un gran proyecto de movilidad, desde las críticas ambientalistas y de movilidad son infraestructuras que después de tiempo quedarán obsoletas y que no promueven el uso de la bicicleta como medio de transporte, sino que, al contrario, ponen a los ciclistas en peligro.