Si no eres padre no puedes opinar, si no tienes hijos evita comentar acerca de este tema… Durante años escuché esa réplica, cómo una casualidad establecía los límites de la capacidad crítica, un corral para acotar la inteligencia y sobrevalorar la experiencia.
De un tiempo a esta parte ya soy padre, para algunos ya me gané el derecho a opinar sobre los temas relativos a la crianza y a la educación, gané experiencia pero no necesariamente adquirí los conocimientos que permiten argumentar con fundamentos sobre un asunto; el conocimiento empírico adquirido a lo largo de estos años no es comparable con el conocimiento científico al que se puede acceder, sobre todo, jamás podrá suplantarlo, porque muchas veces está delimitado por las emociones y sentimientos.
En el ciclo escolar que recién finalizó, a mi hijo lo acercaron a los derechos de los Derechos de los Niños, el principio 7 indica lo siguiente: “El niño tiene derecho a recibir educación que será gratuita y obligatoria por lo menos en las etapas elementales. Se le dará una educación que favorezca su cultura general y le permita, en condiciones de igualdad de oportunidades, desarrollar sus aptitudes y su juicio individual, su sentido de responsabilidad moral y social, y llegar a ser un miembro útil de la sociedad”. Ante la posibilidad de regresar a la escuela en el esquema híbrido, mi hijo recordó que tenía derecho a la educación, usó ese conocimiento para pedir que lo dejáramos asistir al aula.
Ese mismo principio, añade “El interés superior del niño debe ser el principio rector de quienes tienen la responsabilidad de su educación y orientación; dicha responsabilidad incumbe en primer término, a sus padres”, así, decidimos en familia que aún no estaban dadas las condiciones para que regresara y que esperaríamos al siguiente ciclo escolar para, una vez revisados los protocolos que seguirían en la escuela y lo que nos correspondían en casa, hacer de su regreso algo seguro para todos.
El presidente ha dicho que “Llueva, truene o relampaguee” en el siguiente ciclo escolar habrá clases presenciales, y la discusión nacional se ha transformado en discutir con López Obrador acerca del regreso a clases, asociaciones de padres de familia lo atacan, Vicente Fox se suma a quienes le llevan la contra y tuitea su “Desacuerdo total en el pésimo manejo de la pandemia. Muchos niños muertos llevarán en su conciencia. Espero recapaciten!! No queremos NIÑOS muertos en la escuela”… Una muestra de la política miserable de la oposición sin imaginación. Culpar al gobierno federal por brindar un esquema de retorno a las aulas de ninguna manera se convierte en una obligación para los padres, participar en estas disputas estériles, achacar culpas y acusar de asesino al gobierno, a los gobiernos porque en cada entidad el proceso ha sido distinto, lo único que hace es que como padres nos deslindemos de la responsabilidad.
Frente a la extensión de la pandemia y las mutaciones del virus, cada vez es más urgente e importante pensar en cómo construir una nueva normalidad, una que pase por el respeto de los derechos de todos, que no se estanque las polémicas idiotas de culpar de todo al gobierno para eludir la responsabilidad ciudadana. Personalizar los conflictos que como sociedad tenemos que resolver detienen el proceso de deliberación necesario para encontrar soluciones para el mundo en que merecemos vivir.
Coda. La periodista Azucena Uresti, junto con Milenio, Televisa y El Universal fue amenazada por el Cártel Jalisco Nueva Generación, merece toda nuestra solidaridad, ya una gran parte del gremio periodístico se lo ha hecho saber, un tuit de Ciro Murayama refleja con precisión la situación “La democracia y la libertad sólo pueden existir si hay libertad de prensa. La terrible amenaza contra @azucenau es inaceptable. Las autoridades encargadas de la procuración de justicia no pueden mirar hacia otro lado. Toda mi solidaridad a una periodista ejemplar”. Como con el tema del regreso a clases, culpar a una persona, entregarle toda la responsabilidad es caer en el juego maniqueo de un poder centralizado, que las autoridades responsables, que las instituciones cumplan con su tarea y brinden la protección necesaria a Azucena Uresti y a todos.
@aldan