APRO/Melisa Carrillo
El Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) demandó a empleadores y al Poder Legislativo garantizar una labor digna, bien remunerada y con seguridad social para las trabajadoras del hogar.
Durante el foro virtual “Avances y desafíos en el reconocimiento de derechos laborales por la igualdad y la no discriminación”, en el marco del Día Internacional de las Personas Trabajadoras del Hogar, el organismo subrayó la necesidad de afiliarlas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Claudia Morales Reza, representante de la comunidad wixárika de Jalisco, precisó que los empleadores no siempre consideran a las personas trabajadoras del hogar como empleadas, sino “como parte de la familia” o “quienes les ayudan en la casa”, y normalizan actitudes condescendientes y violaciones a sus derechos.
Además, apuntó, las trabajadoras enfrentan discriminación y otros tipos de violencia, en especial las de origen indígena, que son rechazadas por su identidad cultural, y para conservar sus trabajos se ven obligadas a modificar su forma de vestir y dejan de hablar sus lenguas maternas.
La representante de Nosotrxs, Andrea Santiago Páramo, destacó la importancia de proporcionar seguridad social a las trabajadoras, sobre todo en el contexto de la pandemia, y recordó que un gran número de ellas aún no han sido incorporadas al programa piloto del IMSS.
De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Discriminación 2017, sólo una de cada 10 personas trabajadoras del hogar contaba con alguna prestación laboral, como aguinaldo, vacaciones o seguro médico, mientras 98% no contaba con un contrato escrito.
El IMSS y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) reportaron que hasta el momento 27 mil 295 personas trabajadoras del hogar se han incorporado al IMSS, siete veces más de las que se registraron en abril de 2019.
Sin embargo, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), 88% de esas personas ganan dos salarios mínimos o menos, 42% trabaja más de 35 horas a la semana, 96% labora sin contrato y 69.9% no tiene prestaciones.
La representante de Women in Informal Employment Globalizing and Organizing (WIEGO), Tania Espinosa Sánchez, comentó que los empleadores tienden a interrumpir el pago del sueldo a sus trabajadores, y que durante la pandemia las personas trabajadoras del hogar han padecido una disminución significativa de su ingreso económico.
María Nancy Rojas Agudelo, representante del Centro de Apoyo y Capacitación para Empleadas del Hogar (CACEH), agregó que los empleados también enfrentan el aumento del trabajo con un mismo salario o con una paga reducida y la suspensión de su labor sin sueldo.
En este sentido, Rojas Agudelo hizo un llamado a la sociedad para concientizarse y visibilizar la lucha de las personas trabajadoras del hogar por sus derechos laborales.
A su vez, Morales Reza exhortó al Poder Legislativo a establecer la obligatoriedad del programa piloto del IMSS para que todas las personas trabajadoras del hogar tengan seguridad social.