Nota introductoria, no estamos diciendo las redes sociales y los monopolios de las redes sean buenas o que tengan la razón, pero si de algo estoy –estamos– seguras es que la regulación por parte del Estado no se hace.
La entrega pasada de #LaFemTIC les contaba que Internet no tiene un gobernante sino que se trabaja desde un modelo de participación en igualdad de condiciones llamado múltiples partes interesadas –acá también les decía que no todo es amor, pero que ha funcionado hasta el día de hoy- y es lo que ha permitido que Internet se mantenga libre, abierta, segura –o el intento de– y a lo largo del año se realizan diferentes eventos foros donde todas todos nos sentamos para presentar resultados dialogar, debatir.
Pero cada tanto aparecen propuestas que buscan controlar las redes sociales con una iniciativa disfrazada con la que quieren hacer creer que el estado va a salvaguardar los derechos de las personas. Iniciativas que únicamente con escucharlas te quedas con la cara de duda total pero “claro mi libertad”.
El senador Ricardo Monreal insiste en regular las redes sociales para que sea el estado quien diga qué sí y qué no, y no la empresa (sí las redes sociales son empresas).
Primero, ¿por qué defendemos las redes sociales? Bueno, pues al estar alojadas en Internet son parte de todo este mundo complejo que forma el ecosistema y porque en específico las redes sociales se han convertido en una herramienta para la democratización y socialización de muchos temas. No me imagino como sociedad civil sin esta herramienta –que no es la única– que nos ha permitido dar a conocer el mal trabajo que realiza por ejemplo el Congreso local y sus iniciativas antiderechos y que gracias a la viralización de las redes se hace un eco que nos ayuda a frenar o cambiar realidades. Y también sabemos que en temas de denunciar contenido que violenta derechos o la seguridad de las mujeres grupos vulnerables es un show, pero sabemos que para logar esas denuncias el camino es otro no el de imponer.
Toda persona o personaje debería primero entender cómo funcionan las redes sociales el mismo Monreal dijo en una entrevista para El País: “Considero que las redes utilizan insumos públicos como el espacio radioeléctrico o la fibra óptica de Internet y debemos garantizar que se respete el derecho a que digas lo que digas no te censuren”.
Podemos ver este tema desde al menos dos distintos ángulos, primero las redes sociales tienen una serie de normas de conducta de la empresa y al detectar que se dice algo que vulnera procede, pero al proceder no elimina en automático, pasa por avisarte y luego te suspende unas horas, días, etc. hasta que elimina –a mí, por ejemplo, ya me han suspendido mi cuenta un mes– y esto con base en las “reglas del juego de la red social” que todas las personas aceptamos al entrar –importante: no es obligatorio tener redes sociales el derecho es al acceso a internet cada quien decide en ese acceso tener o no redes sociales.
Que el pretexto para regular las redes sociales sea desde la libertad es jugar muy sucio, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y su Relatoría Especial para la Libertad de Expresión (RELE) han dicho “los derechos humanos gozan de la misma protección y amplitud en entornos analógicos y digitales. Internet es una plataforma y un medio para el ejercicio de los derechos humanos como la libertad de expresión, la participación política, los derechos de asociación y reunión, derechos económicos, sociales y culturales entre otros. Los Estados están llamados a garantizar las condiciones necesarias para el goce y ejercicio de estos derechos”
Otro punto importante que las empresas de redes sociales sean utilizadas en México no quiere decir que Internet sea del estado y es importante hacer una distinción, Internet no es una red social, la red social forma parte del espacio digital pero no le pertenece al Estado, de hecho, México reconoce el derecho a Internet desde su acceso.
“Internet es un insumo básico para ejercer otros derechos, como la libertad de expresión e información, salud, acceso a la cultura, entre otros. Internet es una red de redes internacional regida y resguardada por diversos actores –sector técnico, de personas usuarias, plataformas digitales, academia, sociedad civil, gobiernos de distintos países, entre otros– que han participado por años en su arquitectura y gobernanza. El grado de intervención del Estado en esta infraestructura depende de la necesidad y el fin que pretenda perseguir, limitado a una necesidad social imperiosa que no restrinja el ejercicio de derechos humanos a través del uso de Internet, especialmente de la libertad de expresión e información” Artículo 19, comunicado #InternetBajoAtaque
Las iniciativas que se hacen en la materia deberían estar centradas en el respeto y extender los derechos humanos a todos los espacios, garantizar la privacidad y la protección de todos nuestros datos personales (ojo el gobierno también debe cumplir con eso).
¿Qué pretende el estado al controlar lo que decimos, lo que contamos y publicamos en nuestras redes sociales?
Necesitamos que el gobierno se involucre pero que se vea participando activamente en la gobernanza de internet, el reto de involucrarse está en esa multidisciplinariedad y muy en especial en la política detrás de, es decir cómo juntas a las y los amigos y no amigos para ponerse de acuerdo en cómo van a proponer cada quien desde su expertis, por ejemplo un tema pendiente como la neutralidad de la red desde un enfoque de seguridad, tecnología, derechos humanos y económico.
En la entrevista realizada por El País con fecha del 6 de febrero el reportero le pregunta a Monreal “¿Hablará con la sociedad civil?” a lo que Monreal responde “Ayer hablé con las plataformas, la semana que viene con institutos de investigación y académicos. Después pediré una opinión al IFT como órgano autónomo… y ya”
No trates a Internet como medio de comunicación tradicional mejor invítale un café, entiende de qué trata y súmate a un trabajo colectivo aunque a las personas que debas invitar para lograr la multidisciplinariedad no te caigan bien.