Estas tres palabras con la que titulo el MARCA TEXTOS de hoy; son su estandarte de los Harlem Globetrotters, es un equipo de basquetbol de los Estados Unidos que combina el entretenimiento y el show en cada uno de sus encuentros. Conjunto fundado en el año de 1923, ha jugado más de 26 mil partidos en 123 países.
El fundador Abe Saperstein, se hizo cargo de un equipo de nombre Savoy Big Five. Disputaba sus partidos en el Savoy Bal en el barrio de Manhattan, Nueva York. En 1927 cambiaron de nombre por los Globetrotters. Terminaban cada temporada con una marca ganadora, sus números eran de 102 victorias por 6 derrotas en el año de 1927, en 1928 ganaron 145 partidos y 13 juegos perdidos, en 1929 dejaron una marca de 151 victorias y 13 descalabros.
Ante la dificultad de encontrar equipos con los que enfrentarse. En el año de 1929 se concibió la idea de crear un espectáculo deportivo que fusionara el basquetbol con la comedia. Resultando esta fórmula una gran atracción para la gente que acudía a presenciar sus partidos. Realizan tiros de gran distancia, acrobacias, tretas, trucos ante su oponente. Cuando los Globetrotters hacían giras por varios países, sus rivales en turno eran equipos profesionales de basquetbol de la liga de cada nación donde jugaban. Los estadios lucían llenos, la gente iba a ver a los Harlem Globetrotters, pagaba un boleto por ver la magia, el talento y el espectáculo de estos basquetbolistas estadounidenses; que lucían un uniforme muy estrafalario, extravagante, en cada una de sus presentaciones. A la fecha siguen llevando su show a varios puntos del mundo.
Cuando acudes a un evento deportivo, pagas un boleto para poder tener acceso a un inmueble. Te acomodas en tu butaca, pides un refresco, cerveza, botana, adquieres alimentos para acompañar las bebidas refrescantes. Te invade la emoción, la alegría, el gozo, porque vas a ver a tu equipo favorito, a tu ídolo jugar; traes puesta la playera del equipo de tus amores, le vas a ese equipo porque tu papá, tu abuelito, tu hermano mayor le van a ese conjunto, es una tradición familiar apoyar a ese equipo, estás con ellos en las buenas y en las malas, le eres fiel a los colores.
Hay personas que les gusta el deporte blanco: el tenis, lo practican además de ir a un estadio de tenis para ver a los grandes exponentes de esta disciplina. Se sienten identificados por el tenista, le siguen la trayectoria, están al pendiente de las notas periodísticas, están enamorados por su técnica, su estilo, su pasión, talento, magia, carisma, personalidad que le impregna cuando está disputando un partido en una cancha de tenis. Es un deleite verlo y pagan un boleto porque están seguros que van a ver un espectáculo.
En el deporte blanco, en el tenis existe el Harlem Globetrotter. Se trata del tenista profesional nacido en Arak, Irán el 26 de abril de 1956, con nacionalidad francesa desde el año de 1989: Mansour Bahrami. Jugo para su país en la Copa Davis cuando Mansour tenía 16 años de edad, consiguiendo el triunfo para el equipo Iraní. A finales de 1970 la Revolución Islámica en Irán, catalogó al tenis como un deporte capitalista y elitista. En el territorio iraní se cerraron todas las canchas de tenis. Bahrami jugó por tres años el backgammon. Huye a Francia por la situación sociopolítica de su país natal, donde retoma la práctica del tenis.
Mansour Bahrami tuvo una marca perdedora en la categoría de single: 22 victorias contra 46 derrotas, el 9 de mayo de 1989 estuvo posicionado en el puesto 129 del Mejor Ranking. Participó en el Abierto de Australia de 1977, Roland Garros de 1981, y Wimbledon en 1976.
En la categoría de dobles, tuvo un record de 100 ganados contra 133 derrotas, el 6 de julio de 1987 se posicionó en el puesto 31 del mejor ranking. En dobles jugó el Abierto de Australia de 1977, Roland Garros de 1989, Wimbledon en 1988, y Abierto de los Estados Unidos en 1987.
Mansour Bahrami, tuvo marca perdedora tanto en singles y doble, adquirió mucha fama por su personalidad, sus magníficos trucos con la raqueta, por su estilo de juego, por su talento al momento de golpear la pelota de tenis con su raqueta. Realizaba tiros con efecto, a contrapié, de espaldas a la red, debajo de las piernas,y tiros al ras del piso. Jugadas de fantasía. Convirtiéndose Mansour Bahrami en un verdadero showman, en el Globetrotter del tenis. Divirtiendo, entreteniendo, recreando, deleitando a los aficionados al tenis que acudían a verlo jugar. Su espectáculo estaba cargado de bromas, coreografías aderezadas con sus vistosos tiros de raqueta.
Se retira del tenis profesional en el 2003, a partir de ese año Mansour Bahrami es donde adquiere fama por su espectáculo tenístico de fantasía y trucos con la raqueta. Se hace acompañar de exestrellas del tenis retirados, montan partidos de exhibición en la categoría de dobles.
Excelente día.