Hombres y obras del Aguascalientes moderno (2ª. Entrega) - LJA Aguascalientes
23/11/2024

En 1962, el profesor Enrique Olivares Santana llegó a la gubernatura, venciendo en el proceso electoral a la coalición integrada por el PAN, la Unión Nacional Sinarquista y la Unión Cívica Aguascalentense. Dicha coalición llevó como representante a la profesora Rosario Alcalá.

Francisco Guel Jiménez llegó a la gubernatura en 1968 con el 99.08 por ciento de la votación y un padrón de 118,343 electores, de los cuales votaron 80,383 ciudadanos. El del PRI fue el único candidato registrado ante los órganos electorales.

Seis años más tarde, el profesor Refugio Esparza Reyes se enfrentó al panista J. Guadalupe Esparza. El proceso electoral arrojó 63,840 votos para el PRI y 12,709 para el albiazul. Por su parte el Partido Popular Socialista sólo registró candidaturas para diputados y presidentes municipales.

En las elecciones de 1980, por primera vez el PRI se enfrentó, además del PAN, a nuevas fuerzas políticas como fueron los partidos Popular Socialista, el Auténtico de la Revolución Mexicana, el Socialista de los Trabajadores, el Demócrata Mexicano y el Partido Comunista. En este contexto Rodolfo Landeros obtuvo 80,747 votos y Enrique Franco, abanderado del PAN, alcanzó sólo 8,116 sufragios. El cómputo para los otros partidos no fue relevante.

Después de la derrota del PRM en 1940, la fuerza electoral del PRI fue indudable hasta agosto de 1995. En 1986 Miguel Ángel Barberena fue el ganador con setenta y cinco por ciento de los votos a  favor del PRI, es decir, obtuvo 136,051 votos, 55,304 más que su antecesor. En esta ocasión también participaron el PAN con Rafael Medina, quien logró 34,515 votos, y los partidos de la llamada chiquillada con menor incidencia electoral como el PARM, el PDM, el PSUM-PCM, el PST y el PMT.

El triunfo contundente del PRI se repite en 1992: Otto Granados Roldán es electo gobernador con la fuerza mancomunada de los partidos PRI, PARM, PFCRN Y PPS (algunos de estos partidos le dieron su apoyo abiertamente, otros lo hicieron a distancia). El PRD a la mitad del camino se quedó sin candidato y el PAN llegó a la elección con una votación menguada por la división de sus cuadros. Por su parte el PRI conquistó las once presidencias municipales, a pesar de los conflictos previos suscitados en San José de Gracia, Rincón de Romos y Cosío. También obtuvo las dieciocho posiciones de mayoría relativa en el Congreso local, mas dos de las siete de representación proporcional; las otras cinco fueron para el PAN, PRD, PPS, PFCRN y PARM.

La contienda electoral de 1992 todavía arrojó cuentas felices para la gente del PRI: Otto Granados Roldán triunfó con una clara ventaja sumando un total de 139,000 sufragios, es decir, 5,000 votos más que su antecesor inmediato en 1986, y sesenta mil más que Rodolfo Landeros Gallegos en 1980.

Por otro lado, el PAN se convulsionó al mismo tiempo que algunos cuadros calificados lo abandonaron. El PRD  apenas sentó sus reales. Aún así el PAN, con Gerardo Raygoza Rosales como candidato a gobernador, obtuvo treinta mil sufragios, y el PRD a la mitad del camino se quedó sin candidato, dejando el protagonismo a Fernando Alférez, quien jugaba para presidente municipal de Aguascalientes.

En 1994, se registró una votación a favor de los panistas de 86,000 sufragios, frente a 93,000 para el PRI, y para las elecciones para alcaldes de 1995 los electores le retiraron al PRI miles de votos en todo el estado. Nada más en el municipio de la capital el PAN logró poco más de 36,000  votos respecto al PRI, que alcanzó algo más de 56,000 votos. En todo el estado 125,101 votos fueron para el PAN, 95,468 para el PRI, 16,629 para el PRD y completaron los 257,791 votos el resto de los partidos contendientes, sobre una lista nominal de 429,466 electores, lo que significó un índice de abstención de casi cuarenta por ciento. Puede afirmarse que en la ciudad capital no se incrementó el panismo, sino que el PRI retrocedió; o dicho de otro modo: en buena medida el PAN no ganó las elecciones, sino que se aprovechó del abstencionismo. Entonces el panismo se adjudicó cuatro de las once alcaldías, empezando por la capital, Aguascalientes, más Calvillo, Cosío y Rincón de Romos; el resto las retuvo el priismo.


*Profesionista de origen campesino, activista social, catedrático y político

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