¿Qué sigue ahora para el Partido Revolucionario Institucional?. Lo que sigue ahora es una nueva etapa. Con actitudes positivas y acciones constructivas. Una nueva fase en la que debemos acercarnos más a la sociedad para conservar y acrecentar su confianza rumbo a las elecciones del año 2010.
En las urnas se confirmó la tesis de que el Partido Acción Nacional ya no es una opción de gobierno. El Partido Acción Nacional, en el pecado del mal gobierno, lleva la penitencia.
El Partido Revolucionario creció y está en una línea de muy digna competencia. Donde es gobierno actúa con transparencia y eficacia; donde es oposición actúa con propuestas y crítica responsable. Así es como está preparado para disputar y ganar la gubernatura de Aguascalientes en el año 2010. La inconformidad social contra el Partido Acción Nacional y su gobierno será más severa, exigiendo un cambio de modelo político y económico.
El PAN se ha venido degradando gradualmente, esto se manifiesta en la pérdida de votación. El Partido Revolucionario Institucional se mantiene como un partido estable y en recuperación; esta es una excelente señal para el electorado nacional y local.
El Partido Revolucionario Institucional debe demandar y exigir cuentas claras en el ejercicio del presupuesto emanado de los contribuyentes. La transparencia y la legalidad son dos principios a los que no se debe renunciar.
En esta nueva etapa de su vida interna, el Partido Revolucionario Institucional, debe actuar con reglas del juego y criterios políticos claros, definidos con el consentimiento de todos los priístas. Para la sucesión de gobernador en el 2010, no deberá haber “caballo negro”; deberá haber absoluta imparcialidad y equidad para todos los prospectos dejando claro que en este momento no hay nada para nadie, a pesar de lo que se diga y escuche, no deberá haber preferencias o dados cargados, las coaliciones o alianzas no las determinarán los aspirantes sino las dirigencias de los partidos políticos nacionales.
En esta etapa, debe promoverse al Partido para su fortalecimiento y no concederse privilegios a ninguno de los aspirantes. Tampoco debe discriminarse a nadie.
Ni los integrantes de la dirigencia actual ni militante alguno tienen la propiedad del Partido Revolucionario Institucional, ya que es una institución fundada, establecida y fortalecida con la voluntad colectiva de la militancia. Institución que administra los tiempos y los procedimientos, que tiene principios y cuenta con normatividad interna que constituyen la base para la disciplina política, que no el silencio ni la parálisis.
La dirigencia del Partido Revolucionario Institucional no está facultada para eliminar políticamente a nadie, tampoco está mandatada para convertirse en el gran elector, para ello existen órganos de gobierno como lo son los consejos políticos estatal y municipales así como la Comisión Política Permanente, los cuales vigilan celosamente el procedimiento de selección de candidatos. De esta manera, la fuerza del Partido Revolucionario Institucional se encuentra en su militancia y en las bases ciudadanas y no en el laberinto de las élites.
Es una realidad que en estas elecciones, en Aguascalientes creció electoralmente el Partido Revolucionario Institucional. Ganó el segundo distrito federal y alcanzó un empate técnico en los distritos uno y tres, puesto que la diferencia en esos distritos es mínima. Así, la dirigencia del Partido Revolucionario Institucional en nuestra entidad, observa una militancia que camina aceleradamente para que el priismo obtenga más triunfos electorales el próximo año.
Las bases priistas demandarán procesos democráticos en cada municipio. Luego, la dirigencia tendrá que actuar en consecuencia: no serán los amigos y los recomendados los que lleguen gratuitamente a las candidaturas; llegarán los jóvenes, las mujeres y los hombres más comprometidos con la militancia y con la sociedad de Aguascalientes. Llegó el momento de darle su lugar a cada liderazgo regional. Todas las expresiones en el Partido Revolucionario Institucional tienen cartas fuertes para armar el equipo ganador del 2010.
Finalmente, el Revolucionario Institucional deberá aceptar y llevar las críticas de los priistas probados al Consejo Político Estatal. Los priistas no probados también tienen derecho a la propuesta y a la crítica, pero antes deben demostrar su cartilla de militante y su lealtad al propio partido.