Al contrario de muchos negocios, la industria de venta de juguetes sexuales creció durante la pandemia por COVID-19. En México, la empresa de venta de artículos eróticos y sexuales, Erotika, reportó un incremento en sus ventas en línea del 280% desde que se anunciaron medidas de aislamiento. A pesar de tener restringida la venta en sus tiendas físicas cerradas, la empresa presenta ventas récord.
Ante la imposibilidad de salir a entretenerse o reunirse con alguien más, la gente en México y el mundo ha buscado formas de pasar el tiempo desde su espacio privado. Las reuniones por videollamada, videojuegos, libros, redes sociales, música, películas, entre otras cosas, han sido medios para que la gente pueda utilizar su tiempo libre. Sin embargo, un tema del que se habla poco es la sexualidad, la cual, a partir de lo mencionado en el primer párrafo, también es una forma muy recurrida de pasar el tiempo en aislamiento.
Cualquier tema que se relacione con la sexualidad es comúnmente considerado como tabú. Incluso han algunos grupos que buscan que en las escuelas ni siquiera se impartan temas de educación y salud sexual básica, como muestra el Pin Parental. El placer y el erotismo son temas que prácticamente no aparecen en el plano público, incluso a nivel privado hay personas que se niegan a tratarlos. Esto puede explicarse a partir de varios elementos como creencias religiosas, ideologías, educación recibida desde la infancia, machismo, etc.
A pesar de ello, actualmente existe un esfuerzo importante por tratar estos tema de manera libre. La educación sexual y reproductiva ayuda a que una persona pueda tomar decisiones razonadas e informadas; de esta forma se pueden prevenir embarazos no deseados, enfermedades de transmisión sexual y comportamientos abusivos hacia otras personas.
Por otra parte, dejar de lado el tabú que conlleva el erotismo y placer fomenta relaciones más sanas y libres. Incluso si una persona prefiere ejercer su sexualidad sin compañía, el uso de juguetes e instrumentos sexuales ayuda a que descubra más de sí misma. La sexualidad libre y responsable implicar conocer y reconocer libertades propias y ajenas, así como límites en la forma en la que nos relacionamos con el exterior y nuestro cuerpo.
Esconder y condenar estos temas, sea cual sea la razón, comúnmente desemboca en prejuicios y señalamientos condenatorios que frecuentemente están alejados de la realidad y merman la dignidad de las personas. Acercarse a estos temas, adquirir mas información, plantear dudas y discutirlas, puede crear una sociedad más abierta en cuanto a la sexualidad. Este cambio de pensamiento provoca una nueva forma de aproximarse a estos temas y otras personas. La información trae respeto por los cuerpos de otras personas y el propio.
A fin de cuentas, el tiempo en aislamiento ha mostrado que poco a poco la sexualidad deja de ser un tema tabú. Esto indica que pronto llegará un cambio en el imaginario social acerca de estos temas, lo cual es una buena noticia para crear sociedades más abiertas y plurales.