CIUDAD DE MÉXICO.- El Centro de Investigación Económicas y Presupuestaria (CIEP) urgió a una reforma integral de pensiones, que permita disminuir los efectos en desigualdad y pobreza de la presente generación y las siguientes.
Al presentar las Implicaciones del Paquete Económico 2021, el organismo encabezado por Héctor Juan Villarreal dio cuenta que el incremento del gasto en pensiones limita el espacio fiscal para promover e implementar políticas públicas dirigidas a paliar la crisis por la covid-19.
En cifras, el gasto en pensiones crece entre 5% y 7% cada año, en promedio. Mientras que para 2021 el gobierno de Andrés Manuel López Obrador planea gastar 1.2 billones en pensiones o 4.9% del Producto Interno Bruto (PIB), un punto porcentual por arriba de lo que se piensa recaudar por concepto del IVA en el mismo año.
Un presupuesto con poco espacio fiscal
De acuerdo con el CIEP, el Paquete Económico 2021 que entregó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) tiene un reducido espacio fiscal y menores ingresos presupuestarios, además de que no cuenta con una respuesta para contrarrestar la crisis económica y sanitaria derivada del covid-19.
Para el próximo año, el presupuesto federal prioriza el gasto en programas y obras emblemáticas de la presente administración; sin embargo, sectores como salud pública y educación presentan un presupuesto sin cambios significativos para atender la emergencia.
A pesar de que el presupuesto propuesto para 2021 representa 25.2% del PIB, el margen de maniobra con el que cuenta el gobierno federal es de 2.0% del PIB, acotó el CIEP.
En este contexto, el centro de análisis consideró que para que el gasto de transferencias sea sostenible en el largo plazo, será necesario un replanteamiento del gasto público.
Gasto en salud, insuficiente
Por su parte, el presupuesto de salud es 12 mil 758 millones de pesos (mdp) más que al aprobado en 2020.
En específico, la Secretaría de Salud (Ssa) tiene aumento de 9.1% que proviene de los recursos del Fondo de Salud para el Bienestar (FSB), pero se recortaron 21 de los 29 programas de la Ssa, cuyos recursos se reasignan al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) que tuvo un aumento de nueve mil 538 mdp, a pesar de que en su iniciativa de creación se anunciaron 40 mil mdp.
Mientras que programas de prevención, vacunas, infraestructura y mantenimiento de infraestructura de la Ssa, IMSS e ISSSTE disminuyeron. Además, no se identifican recursos para vacunas contra el coronavirus.
Pemex, barril sin fondo
Otro de los sectores que absorben una gran cantidad de recursos es Petróleos Mexicanos (Pemex), el cual tiene un aumento presupuestal de 4.1% con respecto al Presupuesto de Egresos 2020, mientras que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) tiene un recorte de 13.1%.
“Con esto, Pemex tiene acaparado el 56.3% del gasto total del sector en 2021”, acotó el CIEP.
En general, el gasto del sector tiene un recorte de 3.2%. El ajuste se da en el gasto corriente, pues este disminuye 5.8%, mientras que el presupuesto de inversión aumenta 13.1%. La transferencia presupuestaria a Pemex para la construcción de la nueva refinería en Dos Bocas, Tabasco, es de 45 mil 50 millones de pesos, y es un 6% inferior con respecto a lo asignado en 2020.
Estados mermados en sus finanzas
Otro de los puntos rojos que identificó el CIEP es el gasto federalizado proyectado para 2021, que equivale a un billón 867 mil 338.4 pesos reales, 5.5% menor al aprobado para 2020.
“Permanece la inercia distributiva del gasto federalizado. En 2020 y 2021 los principales receptores de gasto federalizado real per cápita serían Ciudad de México, Baja California Sur y Campeche; los que menos recibirían serían Guanajuato, Estado de México y Jalisco”, explicó.
Todos los estados recibirían menos gasto federalizado en 2021 en comparación con 2020. Tamaulipas y Zacatecas son los que presentan menores decrementos con 2.8% y 3.4%, respectivamente. Ciudad de México y Campeche son los que presentaron mayores reducciones con 17.7% y 10.8%, respectivamente.
Agotamiento de los guardaditos
En cuanto a los ingresos, el panorama no es halagador.
Los ingresos presupuestarios estimados en la Ley de Ingresos de la Federación ascienden a 5.4 billones de pesos y son 0.5% menores en términos reales a los estimados al cierre de 2020.
La caída se atenúa por el uso de los recursos provenientes del Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios (FEIP) y otros fideicomisos para este año, tan solo del primero, se tomarían 236 mil 400 mdp para el cierre de 2020.
“El agotamiento en 2020 de los recursos del FEIP disminuye las alternativas para reaccionar en el futuro ante caídas en el ingreso, dejando como únicas opciones, en caso de contingencia, recortes mayores al gasto o adquisición de deuda”, advirtió el CIEP.
Así, los ingresos siguen siendo los menores dentro de las economías que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), por lo que el CIEP acentuó la importancia de una reforma fiscal para financiar un estado de bienestar.