APRO/Juan Carlos Cruz Vargas
La economía mexicana registró una caída histórica en el segundo trimestre del año al colapsarse -18.7% anual, impactada por el confinamiento derivado del Covid-19 que inició a finales de marzo y se prolongó hasta junio, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Se trata del peor tropiezo en la época moderna del país, superando al desplome de la Gran Recesión del 2009, cuando el Producto Interno Bruto (PIB) se desplomó -7.7% en el segundo trimestre de dicho año y al- 8.6% ocurrido en el mismo período de tiempo, pero de 1995.
Durante abril y junio del presente año, las actividades secundarias o industriales profundizaron la crisis que arrastran desde el 2018 al retroceder -25.7%; por su parte, el sector terciario de la economía que son el comercio, servicios y turismo decreció -16.2%; mientras que las actividades primarias o agropecuarias se redujeron sólo -0.2%.
Si se le compara el segundo trimestre con el primer trimestre del 2020, la economía nacional tuvo una caída del 17.1%.
Por otra parte, el Inegi dio a conocer los resultados del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) correspondientes al mes de junio de 2020.
Con cifras reales, ajustadas por estacionalidad, el indicador registró un aumento de 8.9%, tras 4 meses consecutivos de fuertes descensos ocasionados por la contingencia del Covid-19.
De acuerdo con el análisis del Grupo Financiero Monex, los datos de hoy permiten conocer el detalle de la recuperación a finales del segundo trimestre del año.
“De ellos se desprende la imagen de una recuperación parcial y restringida a ciertos sectores. Si bien el aumento de 8.9% es una noticia positiva, la actividad económica aún se ubica en niveles de 2011.
“Además, el pobre desempeño de los servicios impide tener una perspectiva más optimista, pues de los tres sectores es el que tiene una mayor cercanía con la demanda interna, por lo que mantenemos nuestro estimado de una caída de -9.9% en el PIB de 2020.
En la víspera, la agencia calificadora Moody ‘s Investors Service anticipó un crecimiento negativo de la economía situado en -10%.