Aguascalientes es una ciudad que se lee, una ciudad con distancias muy cortas, una buena calidad de vida y una magia que no se puede describir, tienes que experimentarlo en carne propia. Gracias a ti y a la gran respuesta que tuvimos en nuestras dos primeras ediciones, te traemos la tercera parte de esta entrega.
Si conoces alguna otra leyenda o mito que quieras que lo hablemos en este espacio contáctanos en nuestras redes sociales como @SomosLJA o en mi twitter @villalobos_serg
Y así como toda ciudad tiene historias por contar, desde LJA.MX te contamos nuestro…
TOP DE LEYENDAS EN AGUASCALIENTES
El Parecido de Chambergo
Los milagros existen y existieron en Aguascalientes, hubo una ocasión que fue gracias a “el aparecido de la vereda”.
La familia López fue de los primeros fundadores del Barrio de San Marcos, la familia vivía en la calle que ahora se le conoce como Manuel M. Ponce. Don Margarito y su hermano Nestor eran de la parte caudal de la ciudad, tenían una casa preciosa con un estilo muy clásico y amueblada como ninguna otra.
Como toda buena familia aguaslentense, eran devotos, iban a misa a diario, de hecho la familia era bien conocida por su tradición que fueron adoptando conforme pasaba el tiempo, esta tradición constaba de invitar a varios amigos, para participar en la sagrada eucaristía, comían, convivían e inclusive se quedaban con antelación para poder desayunar y así compartir los sagrados alimentos.
La riqueza económica y espiritual desafortunadamente no era suficiente para mantener la salud de la pequeña hija de Don Margarito, era una preocupación constante entre el padre y la madre. Una de sus tareas al acudir a misa era de pedirle a Dios por la salud de su hija, ya que ningún doctor lograba curarla o dar algún diagnostico positivo.
Hubo una ocasión que al llegar a su casa se les apareció un señor alto, enfundado en un traje negro y con un chambergo (un sombrero de cierto estilo), al irse acercando, la figura desapareció, cosa que dejó a todos los presentes extrañados y consternados por lo que acababan de ver.
Este suceso se hizo cada vez más frecuente, motivo por el cual muchas personas no quisieran acudir más a misa, nombrarlo o mencionarlo en la conversación era motivo de miedo e incertidumbre. Los niños de aquel entonces le decían “el aparecido de la vereda”.
Sin importar lo que sucediera la familia López seguía acudiendo a misa con la misa frecuencia, nada había cambiado. Los primeros días de Noviembre, amigos y la familia López se encontraba rezando el rosario a la Virgen de Guadalupe, cuando de repente se apareció la figura exclamando:
“Tuuuuu… Neéstooooor,… tienes… uuunaa… eeenffermmitaa… llévame… con ella… yooo tee laa curaaree.”
Al escucharlo la familia corrió despavorida rumbo a iglesia. Una vez terminada la misa se acercaron con el padre para ver si les podía ayudar, agua bendita, un ritual, rezar, lo que sea que los dejara en paz. El padre sabiamente les aconsejó hacerle caso a aquella figura.
Al día siguiente, Don Margarito junto a un grupo de amigos y hombres conocidos por la familia, acudieron al mismo sitio de las apariciones. La figura emergió de las sombras, Don Margarito al verlo le preguntó:
¿Eres de esta vida o de la otra?
a lo que la sombra le contestó:
“¡mi deseo es curar a la niña!”
Don Margarito ve la figura desaparecer entre las sombras. Al regresar a su casa, Don Margarito se enteró que aquella sombra con su chambergo se encontraba en la habitación de la niña, la sombra puso su mano en la frente de la niña y dijo unas frases…raras, en otro idioma, parecía no ser de este mundo ese lenguaje.
Días después, se le podía ver a la niñita jugando con sus amiguitos, sana y feliz, sólo que… con la marca de una mano en su rostro. La familia López jamás volvió a pasar por la misma vereda desde aquel evento. Este evento fue muy sonado en el Aguascalientes de aquel entonces.
Raza de gigantes
¿No crees que existen los gigantes? Las pruebas a lo largo del globo han demostrado que hubo una existencia de seres magnánimos, amantes de las bellas artes y creadores de muchas cosas que al día de hoy conocemos.
En Aguascalientes una prueba de ello es el cerro del muerto, esa forma perfecta de un ser humano recostado en la posición del descanso eterno. Así como todo lo bueno tiene que terminar, el mundo de los gigantes llegó al final de sus días por causas naturales, el planeta pasó por un período de renovación que causó la destrucción de su mundo con terremotos que se llevaron todo lo que habían llegado a construir, la paz y la prosperidad pasó al olvido.
Pocos fueron los que sobrevivieron en el nuevo mundo, dentro de los sobrevivientes, siempre serán recordados VERLÉ, el príncipe (Su nombre significaba CALIENTES PRIMAVERAS) , y KIRLE la princesa (su nombre significaba AGUAS CRISTALINAS). Ambos tenían la tarea de pedirle a Dios que los ayudara a mantener con vida a su pueblo a lo que Dios respondió:
De quedarse, perecerán todos por falta de condiciones adecuadas. Si se quedan será para toda la eternidad…
Decepcionados por la respuesta, los príncipes avisaron a los que restaban que el destino de sus tierras era quedarse y ser eternos, o ir en búsqueda de un nuevo paraíso. Verlé y Kirle se recostaron, Verlé con dirección al sur, y Kirle con dirección al suroeste cabeza a cabeza junto a su amado, también permanecieron fieles a sus príncipes cuatro de los más valientes caballeros de nombre: GALFO(BUENA TIERRA); TALT (AGUA CLARA), KILSE (CIELO CLARO), y MÁCHI (GENTE BUENA); hincaron una rodilla en tierra e inclinaron sus cabezas a esperar el final.
Un largo eclipse oscureció la tierra de los gigantes y al finalizar, cuando salió el sol, desaparecieron.
Los gigantes tomaron la forma de cerros, aquellas mágicos y majestuosos seres, se convirtieron en protectores de la espiritualidad de Aguascalientes.
Destacan también los cuatro capitanes : que ahora conocemos: Al Sur el Cerro de Los Gallos que fuera conocido por AGUA CLARA; Al Norte el Cerro de San Juan, en el macizo montañoso de Tepezalá, conocido por CIELO CLARO; un kilómetro adelante, el Cerro de Altamira que un buen día llevará el nombre de BUENA GENTE, y más allá hacia el Poniente distinguimos a TIERRA BUENA que es ahora el Cerro del Laurel muy cerca del poblado de Calvillo.” Texto tomado de la sección de leyendas del H. Ayuntamiento de Aguascalientes
Cerro de los Gallos
Aguascalientes es protegido por los cerros, la prosperidad y la paz está bajo su protección, pero hay un secreto en uno de ellos, El Cerro de los Gallos oculta un secreto que puede poner en riesgo nuestro bienestar.
Mucho después de la época de los gigantes, fue la época de los Chichimecas, quienes vivían en tiempos de incertidumbre al estar en constante peligro y una inminente desaparición de su civilización. Suficiente tenían con el sufrimiento que los atormentaba diariamente, el gigante Nahuatlaca defensor de los débiles que se embriagó de su poder y en lugar de ser aquél adorado héroe, se convirtió en un tirano villano.
Quienes se revelaban tenían como destino la muerte, ante la rebelión de sus “protegidos” la Nahuatlaca le pidió la protección de “NATLAZAHUATL“, quien llevaría ruina y muerte al pueblo chichimeca. Esta entidad llevaría a la perdición al pueblo, no con desastres naturales sino con la salud del mismo.
Los sobrevivientes a la hecatombe causada por el gigante Nahuatlaca eran “los gallos” un grupo de hombres fuertes que buscaban justicia. Después de una ardua batalla frente al gigante “los gallos” tuvieron que retirarse del pueblo, buscar refugio al sur debían, mientras que Nahuatlaca se retiraba hacia el norte.
“Los gallos” se enteraron de esta táctica y buscaron sorprenderlo, lo rastrearon y lo ubicaron, esperaron al anochecer; una vez dormido decidieron enterrarlo en vida, palazos de tierra sobre el gigante, uno y tras otro. Al darse cuenta del plan, Nahuatlaca buscó como liberarse, una batalla épica se libró para vencerlo, hasta que una mano gigante salida del cielo usando un chiquihuite ayudó a nuestros héroes a enterrarlo en una montaña de rocas…
Al día de hoy ese cerro esa pila de rocas, es conocida como “Cerro de los Gallos” y del “Chiquihuite”, una prisión para el gigante que busca salir de esa prisión… algún día, tal vez.